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OPINIÓN - DOMINGO 2 DE SEPTIEMBRE DE 2007

 

OPINIÓN / AÑO 55

Una joven representante en Ceuta
de un viejo problema (XXII)

 


Tato Ferrer
tatoferrero@elpueblodeceuta.com

 

Vuelvo a estar tranquilo. Había dejado de estarlo. Desde hace ya mucho tiempo no ando precisamente en un estado de nervios como para ponerme, en el Mercado de Abastos, a vender mis trozos de carne animal cuales filetes que, lo más probable, a la vista del género, nadie terminaría comprando.

De ahí que mis nervios asomados a flor de piel, por encima, de mi sensibilidad atrofiada a golpes de “nuevos” demócratas, se resientan con extrema facilidad.

Ahora, por la cosa más tonta, me crispo como diría un socialisto reconvertido para su mejor fortuna y desgracia de Pablo Iglesias que nunca llegó a imaginar que su idea del socialismo fuera interpretada por tantos filósofos baratos y rastreros.

Por tantos y tantos indecentes que han encontrado y encuentran en esta democracia local el lugar idóneo para medrar sin escrúpulo.

Los principios para los comienzos y finales de los tontos del pueblo.

Las ideas se han perdido. Lo que no se extravía es la brújula indicadora del rumbo fijo del sabiondo arte de vivir del cuento a costa de la política necesitada de una urgente revisión del ganado que se ha metido y se está incorporando en la manoseada profesión de la “cosa pública”.

DE CRISPADORES Y CONFLICTIVOS

Vividores de la política que tienen hasta el valor de dar clases de crispación cuando lo cierto es que son “ellos” los únicos que en verdad irritan. La pérdida de ideas parece que lleva pareja la falta de decencia.

Cuando conozco casos de personas que son tachadas en tal sentido, me entran ganas de ponerlos a parir, si mi educación personal y profesional me permitiesen bajar al terreno de las descalificaciones, en las que, además, seguramente, tendría este “perro con pulgas” todas las de perder, pues a diferencia de esos profesionales, reconozco mi torpeza manifiesta para ponerme a la altura de esa gentuza, especialistas en hacer daño de forma gratuita y alegre.

En este sentido, recuerdo también la historia ocurrida a una hermana mía cuando fue en cierta ocasión a solicitar trabajo al romano perfumado.

Al conocer sus apellidos, el ínclito no tuvo mejor observación que hacerle a Mari Bel:

-¿Tu no serás –le indicó con aromático aroma- tan conflictiva como tu hermano Tato?

Ni que decir tiene que mi hermana Isabel le contestó con un gentil: “váyase a la porra”.

Eso sí, se quedó sin trabajo, y pese a su sangre conflictiva, guarda silencio íntimo de modo elegante que a mí, ya lo creo, me hace ser cada día más radical en este pueblo que agotó demasiado pronto sus energías reclamando sus legitimas reivindicaciones.

CONDENADOS A PUDRIRSE EN LAS CARCELES

Lo he escrito y lo repito. Si de mi dependiera metería en la cárcel a todos y cada uno de los presidentes de los gobiernos democráticos de nuestro país que han tenido “relación” con los asesinos de ETA del GRAPO, del GAL, de ALQAEDA, o de la Chinchiná.

Los demócratas no deben dialogar con los terroristas. Nuestras armas no deberían ser otras que las dimanantes del sistema legal a nuestro alcance: persecución policial, actuaciones judiciales, y relaciones internacionales con aquellos países que puedan convertirse en refugios.

Ahora está la noticia de la colaboración con el gobierno de Portugal, en materia antiterrorista, en relación con el atentado perpetrado en España, del que se ha deducido que dicho país pueda ser una “nueva” sede social del los etarras. Otra base de operaciones.

Con los asesinos no debería de existir más “diálogos”, ni más “procesos de paz”, que los referentes a que el empleo de la violencia será contestada con el “pudrimiento” en las cárceles españolas. Las condenas deberían ser “perpetuas”-“eternas”, sin posibles revisiones de las penas.

Me declaro en contra de la pena de muerte, pero sí a favor de la “muerte en las prisiones” en vida, de los que ejercen terror.

Un sentimiento que nadie mejor que las víctimas de los sangrientos asesinos conocen.

UNA EXPERIMENTADA JOVEN DELEGADA

La Asociación de Víctimas del Terrorismo, (AVT), funciona a nivel nacional desde el año 81, que ha ido creando delegaciones por todo el país. La joven ceutí Teresa López Álvarez , es su delegada en Ceuta, desde el pasado marzo.

Pese a su juventud, Teresa lleva tiempo colaborando con Asociaciones de Víctimas, repartidas por España. Asimismo, con la Fundación Miguel Ángel Blanco, y con la Fundación Jiménez Becerril, entre otras. También con el “Colectivo Víctimas del Terrorismo”.

En la actualidad, en nuestra ciudad, existen 7 familias asociadas.

ANTECEDENTES

Ceuta tiene tres calles en memoria de las víctimas del terrorismo: Mohamed Hamed, Fernando Fernández, y Francisco Pascual. Aún falta una cuarta, que llevará el nombre del general Agustín Muñoz, que se colocará cuando se abra al tráfico la calle en la que irá ubicada, entre Alfaú y Linares. La iniciativa parte de un acuerdo plenario adoptado por unanimidad precisamente el 21 de marzo de hace dos años.

El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, presidió la presentación de tres de las cuatro placas identificativas acompañado del delegado del Gobierno, Jenaro García-Arreciado, y representantes del Gobierno y de los partidos de la oposición UDCE, y PSOE.

Fernando Fernández falleció el 27 de junio de 1975, fecha en la que estallaron dos bombas en Ceuta, una en el aparcamiento entre la Comandancia General y el Parador del hotel La Muralla, y otra en la Comandancia Militar de Marina, edificio en el que se encontraba Fernando Fernández, carpintero de 25 años.

Francisco Pascual era guardia civil en la localidad guipuzcoana de Orio cuando le acribillaron a balazos pistoleros de ETA, a la salida de un café, el 6 de abril de 1980.

Mohamed Ahmed fue también asesinado por ETA el 23 de noviembre de 1984, cuando estaba destinado como policía nacional en Irán (Guipúzcoa).

MONUMENTO COMUN

La concesión de nombres de calles ceutíes en recuerdo de las víctimas de nuestra tierra del terrorismo, se produce de forma inapropiada desde un punto de vista de la efectividad popular.

Hubiese sido, lo sigue siendo, más indicado, la ubicación de un “monumento común” en el cual pudiéramos los ceutíes depositar cariñosas flores en el permanente recuerdo de que sus vidas sesgadas son el tributo injusto de gente de este pueblo que murieron a mano de unos asesinos, cáncer de lo que tendría que ser una democracia española de paz, y no de guerra no declarada, en tiempos de logros políticos, sólo y exclusivamente, por el imperio de la ley.

UNA AUDIENCIA QUE SE DEMORA DEMASIADO TIEMPO

Una de las primeras peticiones que realizó la delegada ceutí de la AVT, fue una audiencia con el presidente de la Ciudad, Juan Vivas. Desde marzo la misma viene demorándose, pese a que este periodista conoce del propio alcalde, en conversación mantenida con él al respecto, su deseo expreso de que se produjera la misma con “toda urgencia”, citando textualmente palabras suyas.

En dicha audiencia con la primera autoridad de Ceuta, la delegada no sólo quiere presentarse, como obliga el protocolo, además de exponerle todo un elaborado y destacable proyecto de ley, elaborado de su propia cosecha intelectual.

En dicho proyecto de ley, igual que ocurre en otras Comunidades, Asturias, Andalucía, o Aragón, por ejemplo, se ha creado una ley de medidas a favor de las víctimas del terrorismo. Existen leyes a nivel nacional, pero desde las comunidades, se pueden ampliar y mejorar la cobertura en el marco de las específicas actuaciones.

Según ha podido conocer este periodista durante la distendida charla con la delegada, el proyecto de ley recogería las siguientes medidas, a saber:

A) Acciones asistenciales con amplio tratamiento en los aspectos sanitarios, psicológicos, y sociales.

B) Especial atención a los menores, sujetos receptores de graves secuelas producidas por la experiencia del terrorismo sufrido en sus familias.

C) Medidas para facilitar el acceso laboral al empleo tanto de las víctimas como de sus familiares directos.

D) El acceso de las víctimas a viviendas no olvidando en ningún momento que además de haber sufrido un atentado terrorista, se encuentran en una situación espiral de abandono.

E) Establecer el reconocimiento de esas víctimas a través de distinciones honoríficas de la Ciudad.

UN LOCAL SOCIAL

La joven ceutí Teresa, al igual que ocurriera con el presidente de la Asociación de Sordos de Ceuta, que marchó para Granada, donde ha encontrado un trabajo fijo, también solicita del Ayuntamiento la concesión de un local social desde el que poder llevar a cabo las gestiones de los afectados.

Sería deseable que esta dinámica, entusiasta, brillante, de destacada valía humana y profesional, no termine también siguiendo los pasos del, asimismo, joven y emprendedor presidente de los Sordos, que ya no está entre nosotros, perezosos de reconocer los méritos de una juventud ceutí maravillosa en sus recursos, emprendedora y no “pasota”, asumiendo tareas y obligaciones de alta responsabilidad social.

Para orgullo de todos los ceutíes, debería de serlo, prueba del grado de madurez que son capaces de demostrar al coger entre sus manos las riendas de asuntos repletos de retos e inquietudes que merecen de todo nuestro apoyo y reconocimiento.

ASOCIACION APOLITICA

Para la delegada de la AVT, la Asociación es de contenido apolítico. Me señala que luchan por la calidad de vida y por las necesidades de las víctimas.

Teresa pone énfasis en el lema: “Por su memoria, dignidad, y justicia”.

La delegada me refiere que “las víctimas son el testimonio vivo de lo que sería una sociedad democrática sana”.

Es de la opinión que, “posiblemente el gobierno actual de, José Luís Rodríguez Zapatero, haya sido el primer gobierno que no ha apoyado a las víctimas del terrorismo perteneciente a la AVT, Foro de Ermua, etcétera”.

Por su parte, la delegada de la AVT, Teresa López Álvarez, se queja de que “en estos 4 años de gobierno Zapatero, desde el inicio del “proceso de paz”, se ha hecho una ley de Solidaridad con las Víctimas de los familiares de los presos terroristas vascos, y no se ha tenido en cuenta a mi Asociación”.

Es contundente en su manifestación cuando se refiere al hecho de que “da la sensación de estar viviendo en un teatro de lo absurdo. En donde los “buenos” ya no parecen tan “buenos”, y los “malos” empiezan a aparecer como “buenos”. Como el caso De Juana Chaos, que se alimenta de las lágrimas de los demás.”

Se da la circunstancia de que, precisamente, el sanguinario asesino De Juan Chaos, fue quien amenazó de muerte a su padre, funcionario de Prisiones, Francisco Javier, de 54 años, compañero de clase de los Agustinos, criado en Ceuta desde la temprana edad de los 5 años, cuando su padre, militar de profesión, coronel de Infantería, se establece aquí procedente del Protectorado Español.

Les recordaré que el etarra De Juana Chaos, en su macabro paso por la prisión ceutí de Los Rosales, tuvo ocasión de “relacionarse” con el padre de la ahora delegada de la AVT, y del entonces también funcionario de Prisiones, Emilio Carreira.

Emilio Carreira, que se dedicaría con posterioridad a la política, ingresando en el Partido Popular, pese a su corpulencia física, siempre ha reconocido su personal y profesional miedo ante la mirada helada, fría, y penetrante, del sanguinario asesino.

Es a mediados de los años 80 cuando Emilio Carreira era el presidente de la Confederación Sindical Independiente de Funcionarios, CSIF, en una entrevista de contenido sindical que apareció publicada con acompañamiento de fotos tanto de Carreira, como del padre de Teresa, cuando dichas instantáneas fotográficas aparecen y son requisadas en una inspección, en un cacheo, practicado en Los Rosales.

Las fotos, fotocopias de las publicadas, estaban en posesión de un terrorista de Jarrai, los jóvenes etarras. El director de Los Rosales aconsejó a Francisco Javier López García de Vinuesa, la urgente necesidad de adoptar medidas cautelares de seguridad y protección.

Es la época de la prisión ceutí que acoge unos 12/15 presos etarras, entre otros, al “ilustre” personaje Ignacio De Juana Chaos, y en la que los funcionarios realizan su trabajo bajo la permanente amenaza de: “se lo voy a decir a mi organización”.

Siguiendo con la historia del padre de la delegada de la ATV de Ceuta, referiré, como hilo conductor visible e invisible en la vida de su hija Teresa, que en septiembre del año 90 el director de la prisión de Las Palmas, le ofreció el cargo de Jefe de Servicio, aceptando. Con posterioridad es conducido casualmente De Juana Chaos, produciéndose enseguida el “saludo mutuo”.

En junio del 91, el terrorista, en un alarde de refinada educación, se dirigió al ceutí Francisco Javier, y le expresó abiertamente su manifiesto “cariño” con la siguiente declaración de “intenciones”:

- ¡Hombre!, Francisco Vinuesa, conocido torturador de las prisiones de Málaga y Ceuta. Usted y sus familiares, sí que son terroristas. También conozco a su hermano Rafael, funcionario de la prisión de Ceuta. Si yo le veo a usted por la calle, le meteré 20 tiros en la frente. El odio que usted le tiene a ETA y ésta actuación que han tenido hoy contra mí, será puesta en conocimiento de mi organización.

Ocho meses después “casualmente” mi compañero de clase, el solidario Francisco, recibe un paquete-bomba a su nombre y a su cargo, en su domicilio, dentro del complejo penitenciario.

Se trataba el paquete de un libro vaciado en su interior que contenía, según fuentes policiales, sobre unos cuatrocientos gramos de explosivos.

En ocasiones, recogían la correspondencia sus hijas, de 11 y 12 años. La mayor, María del Mar, funcionaria del Ayuntamiento de Ceuta, verdadero “motor” de Bienestar Social, y Teresa, que asume desde el pasado marzo la tarea de la AVT, en nuestra ciudad.

Para suerte de Francisco ese día fatídico, grabado con ondas de explosión para los restos, un lunes negro, 6 abril del 92, no fueron sus entonces pequeñas hijas quienes recogieron el correo con remite y matasello de Miranda de Ebro, Burgos, ciudad de la que es originaria la familia del “fiel cumplidor de sus promesas”.

El destino de Dios quiso que fuese Francisco el que recogiese ese día la correspondencia, y que, afortunadamente, el paquete en cuestión le levantara sospechas, evitando con un rápido acto reflejo, una muerte segura.

Con el “libro” en sus manos, sin saber con certeza qué hacer, tan sólo obsesionado por alejar el peligro amenazante del hogar familiar, estuvo deambulando por espacio de dos horas, hasta que logró avistar a un compañero que dio aviso a los artificieros de la Guardia Civil, los Tedax, procediéndose a la explosión del artefacto, que alcanzó los 30 metros de altura, ante la mirada atónita, desesperada, y rota del querido solidario Francisco.

Francisco, querido solidario, funcionario de Prisiones desde los 24 años, y “retirado” por ETA de su trabajo a los 46. De profesional en lo suyo, a adicto al valium, en lo que no tendría razón de ser ni para él, ni para nadie. Por fortuna, puede contarlo. Sus hijas, también.

COMPORTAMIENTOS EJEMPLARES

Las víctimas del terrorismo son todo un ejemplo de clase afectada por el dolor de la muerte inocente por injusta, en esta democracia española que haría bien en reconocer de manera constante la lección de no violencia que practican con su paciencia a prueba de políticos y de políticas encaminadas a que algún día un presidente del Gobierno, se ponga la medallita de haber acabado con el terrorismo. Aunque para ello tomen caminos equivocados de “procesos de paz” y otras gaitas, en lugar del único posible: combatir a los terroristas con la sangre y el sudor de las medidas policiales, judiciales, e internacionales.

Eso sí, sin tregua en el combate de la ley contra los asesinos, contra los sanguinarios, contra los carniceros, de un sistema políticodemocrático que no tiene razón ni fundamento de ser débil ante quienes no entienden más que del lenguaje de las balas 9 m.m. parabellum, goma 2, o otros explosivos de mochilas detonados con móviles o con procedimientos técnicos diferentes.

Lo de menos es la “carga mortal” y sus métodos de detonación. Lo de más, es que España está sufriendo un cáncer desde hace ya demasiados años. Y que nuestra democracia debe tener capacidad legal de reaccionar extirpando un mal que no tiene parangón como si estuviéramos en presencia de una especie de virus de origen desconocido para la sociedad.

El terrorismo es una lacra que ha encontrado en sus víctimas una semilla de comprensión digna de permanente reconocimiento social. Se ha “golpeado” prácticamente en todas las clases del tejido: militares, guardias civiles, policías, funcionarios de Prisiones, escoltas, políticos, civiles…y, sin embargo, la propia delegada de la AVT, en Ceuta, Teresa López, me insiste en una frase que me conmueve sobremanera porque pese al dolor contenido es capaz de manifestar en voz íntima:

- Las víctimas –señala Teresa- nunca hemos pedido venganza, tan sólo JUSTICIA.

Hoy, es el primer domingo de septiembre. Mes en el que la delegada de la AVT, en Ceuta, asistirá en Madrid a una reunión de delegados que se celebrará en la capital del Reino.

VUELTA A LA POLITICA Y AL COLE

En mayo salieron elegidos. En junio “puesta de largo”. En junio/julio, primera reunión para revisar las pagas. En julio/agosto se tomaron merecidas vacaciones. Pero, ya han vuelto, para bien de los nervios crispados y conflictivos de este dominguero que pasea sus “pulgas” deprimidas.

Echo de menos esta época de compra de maletas, libros, cuadernos, y lápices nuevos. Y volver en mi imaginación a los agustinos para reencontrarme con alumnos, compañeros de clase, como el solidario Francisco. En la memoria de los recuerdos conservados. Buenos y malos. Vuelvo, pues, a estar tranquilo. Gracias, políticos. Gracias, colegios. Gracias, por la amable lectura, domingueros.

Puestos a ser agradecidos, gracias a Dios, necesitando de su fuerza espiritual para poder seguir…medianamente tranquilo.
 

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