Está institucionalizado como día
especialmente festivo al conmemorarse el hecho de que Ceuta
tiene consideración de autonomía en la organización
territorial del Estado. Este 2 de septiembre es una de las
fechas históricas que dotan de alma a nuestra ciudad. Un día
como hoy de 1415, Don Pedro de Meneses fue nombrado primer
gobernador de la ciudad incorporándola a la modernidad y
logrando, bajo su mandato, unos niveles de autogobierno de
tal calado que hasta se acuñó una moneda para su comercio
interior, el Ceitil.
Fue Meneses un claro exponente del renacer de Ceuta en su
vinculación histórica con la península ibérica, y su amor
por la ciudad quedó demostrada desde el mismo momento en que
valientemente, y ante la monarquía portuguesa, juró defender
la tierra de sus enemigos asiendo un sencillo palo (Aléo)
que, casi seis siglos después, se ha convertido en un
símbolo de nuestra ciudad.
Con ese mismo espíritu, con el que Meneses gobernó con
plenos poderes pero sin perder la vinculación portuguesa, se
celebra este especial día de la Ciudad Autónoma con el
recuerdo permanente de alcanzar mayores cotas de
autogobierno y de incorporarse, por la puerta grande, al
verdadero Estado de las Autonomías previstas en la Carta
Magna que para el caso de Ceuta se refleja en la Transitoria
V de la Constitución.
Una jornada en el que realizar un sincero acto de contrición
de ceutismo, y valorar muy seriamente con la responsabilidad
y altura de miras exigible en los que políticamente nos
representan, el hecho de retomar con firmeza la reforma del
Estatuto de Autonomía y presentar la propuesta con el tiempo
necesario como para que sea admitida y tratada antes de que
finalice esta legislatura cosa que, por otro lado, ya parece
harto complicado.
El hecho de que Ceuta y Melilla estén unidas en este frente
común debiera suponer el éxito del proyecto autonómico
constitucional. Los elegidos en las urnas, con actas de
diputados de la Asamblea y concejales del pueblo, tienen la
responsabilidad y el encargo de velar por el territorio y su
futuro según marca la Constitución que nos dimos los
españoles.
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