Una de las principales actuaciones que contempla el proyecto
de la EDAR (Estación Depuradora de Aguas Residuales) es la
completa remodelación de la estación de impulsión situada en
San Amaro. Hasta allí se desplazó en la mañana de ayer la
consejera de Medio Ambiente y presidenta del Consejo de
Administración de Acemsa, Yolanda Bel, acompañada del
gerente de la empresa municipal, Manuel Gómez Hoyos, y
varios técnicos.
En esta primera toma de contacto, la responsable del área
expuso su preocupación por los vertidos que, ocasionalmente,
se producen en aguas de Ceuta, como consecuencia de la
paralización de las impulsiones ante los cortes de
suministro eléctrico.
Por ello, Bel ha solicitado la implantación de grupos
electrógenos en todas las estaciones que afecten al litoral
ceutí, de manera que “cuando se produzca un corte de
energía, el suministro alternativo posibilite la impulsión;
evitando así los vertidos de aguas residuales”, explicó la
consejera.
Así, las estaciones de impulsión situadas en la playa de
Benítez, Juan XXIII, la Almadraba, el Centro Gallego y los
bajos de la Marina deberán disponer de estos grupos
electrógenos antes de que dé comienzo la próxima temporada
de baño en la ciudad.
Por otra parte, la consejera de Medio Ambiente ha encargado
un informe exhaustivo a los servicios técnicos de Acemsa
sobre el estado de la red de saneamiento y las 21 estaciones
de impulsión que existen en Ceuta, en el que se recojan las
deficiencias del sistema y las posibles soluciones para
presentarlo al Ministerio de Medio Ambiente, a pesar de que
en el Plan Nacional de Reutilización 2007-2015 existen ya
diversas actuaciones previstas para la ciudad autónoma,
según informó Gómez Hoyos.
Las principales prioridades que el Ejecutivo local
planteará, en materia de saneamiento, son la remodelación de
las estaciones de impulsión y, si fuera posible, su
eliminación; la automatización, al igual que el sistema de
abastecimiento; y la mejora de las zonas más deficitarias y
prioritarias de Ceuta en esta materia.
El recorrido realizado en el día de ayer tuvo como primera
parada la estación de impulsión de San Amaro, que recoge
todas las aguas residuales de la ciudad y las bombea mar
adentro, a través del emisario submarino que se encuentra
situado en la zona de Santa Catalina. Esta estación se
encuentra en un estado “preocupante” y a la espera de ser
automatizada, para que también recoja aguas fluviales, según
explicaron los técnicos de Acemsa.
A continuación Bel visitó las instalaciones de nueva
construcción de Arcos Quebrados, donde se le mostraron los
mecanismos de evacuación de aguas residuales y de extracción
de materias orgánicas sólidas.
Posteriormente, las obras de la nueva impulsión de
saneamiento de la Almadraba fue la siguiente parada. “Nos
encontramos a la espera de recibir las bombas y unas
rejillas de contención”, comentó Bel.
También se visitaron las instalaciones de Juan XXIII, una de
las más importantes de la ciudad por concentrar las grandes
barriadas del campo exterior, y las situadas en los bajos de
la Marina, una de las que más preocupan a la responsable de
Medio Ambiente por su ubicación (frente al Parque Marítimo
del Mediterráneo) y los olores que desprende.
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