Hablar de los asesinos etarras “a
la española” resulta un muermo macabeo. Años repitiendo las
mismas pamplinas y cacareando con voz cursi lo de “la unidad
de los demócratas” que suena tan ñoño que hace rememorar
aquellas ceremonias escolares en los siniestros colegios de
la época, donde, a la más lameculos de las monjitas le
otorgaban la genuina “Banda azul de la piedad”. Que era,
como su nombre indica, un trapo de raso azul bordado en
letras doradas de elegante caligrafía, proclamadora (la
banda) de que, su poseedora era niña virtuosa y como decía
en el discurso la madre superiora “Una florecilla de la
Divina Infantita”.
Supongo que, los demócratas a los que aluden en todas las
alusiones en tono pretendidamente grave, somos nosotros y
nos premian con el apelativo por ser buenos y florecillas de
la Divina Infantita, mientras que, los asesinos, son malos y
antidemócratas y no merecen banda azul sino acción
coordinada de la policía y de la justicia y reprobación de
los virtuosos. Es más, voy a guardar “el minuto de silencio”
por el último atentado con coche bomba de los hijoputas,
para así amedrentarles y hacerles sentir espiritualmente
mal. ¿Qué musitan con sus ojos hipermétropes? ¿Qué si estoy
de coña? Sí lo estoy. Más todavía. Porque todos sabemos que,
el Gobierno Vasco y sus estómagos agradecidos, nunca
facilitarán en el norte el trabajo de nuestras FOP, sino que
priman a los ertzaintzas o como se llamen esos pringados y
no les veo yo acabando con la violencia callejera, ni con
capacidad para desarticular ni a una banda de pandilleros
juveniles dedicada a robar a la salida de los centros
comerciales.
Lo que vengo a decir es que, para servidora, en su
precariedad intelectual que es pública y notoria, los
etarras me parecen cada vez menos organización terrorista,
porque nunca se autoinmolan, sino que les considero una
banda criminal, cuyos miembros carecen de otro oficio ni
beneficio y que utilizan malamente la independentzia y demás
cretineces de ellos para extorsionar a los empresarios y
ganar dinero con el impuesto revolucionario, que n es tal,
ya que tan solo sirve para que, los piojosos, sigan
delinquiendo y cubran sus necesidades básicas. También sacan
dinero y dan de comer a los suyos con los cargos políticos
de los batasunos y las subvenciones del nebuloso cajón del
Gobierno de Ibarreche. Esos no son terroristas en
condiciones, se lo digo yo, en mi catetez rifeña, ¡Manden,
manden a uno a explosionarse y verán como sale corriendo
como una liebre el muy maricón! Estos zarrapastrosos sirven
para el tiro por la espalda o la bomba a distancia, pero
todo sin arrimarse mucho ni jugarse los huevos. Y la culpa
de todo la tienen los dos grandes partidos, porque ya desde
la época del PP hemos alzado voces solicitando la retirada
inmediata de las competencias en seguridad al Gobierno Vasco
y ni Aznar tuvo ni Zetapé tiene, redaños ni cataplines para
hacerlo de un certero plumazo, o mediante consulta popular
nacional.
Los peperos más firmes y con peor leche, miajita más
eficaces con el peligrosamente carismático Jaime Mayor
Oreja, convenientemente espamploneado para que no hiciera
sombra a los pepitos de Génova 13, los sociatas más
blanditos, más crédulos, más pamplineros con el dialogante
Rubalcaba en el puesto que está pidiendo a voces a un
personaje de la valía del ex alcalde de la Coruña, hoy
embajador en el Vaticano y hombre de temple y estirpe. Eta
es pura basura y si les amenazan a ustedes solo tienen que
responder : Lo que a mí me pase le pasa a la madre del
Otegui y a los hijos del Ternera, a las familias de los
abogados batasunos y a las putas que os parieron a todos
juntos ¿Qué dicen? ¿Qué esa es una respuesta muy calorra y
muy incorrecta? No. Es más bien ¿Cómo diría yo? De la leche
de la Reina Católica y del Mío Cid,de Don Pelayo y de
Santiago Matamoros, de los atlantes y de la Pilarica. Es
respuesta española, de españoles y de España.
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