El nacimiento de la comunidad islámica BADR no tiene otro
objetivo según Laarbi Maateis que “tratar de desbancar a
Liazid de la mezquita” para que Mustafa Abdelkader,
“acostumbrado a hablar de forma unilateral”, convierta a su
entidad en la responsable del templo religioso. “Lo que no
entiende”, lamenta, “es que ya existe un titular que trabaja
por la mezquita, por la escuela y por los 300 niños que allí
estudian”, critica.
El apoyo de la Unión de Comunidades Islámicas de Ceuta (UCIDCE)
al imam de los viernes en Sidi Embarek es patente. De ahí,
el enfrentamiento abierto con el portavoz de ‘Luna Blanca’
al que Maateis acusa de “querer sustituir”. A este respecto,
asegura que tanto su federación como Liazid tienen
“magníficas” relaciones con el Ministerio de Asuntos
Religiosos marroquí. “No va a venir este señor a estropear
los vínculos y el respeto que nos profesamos entre los dos
países, los dos reyes, y los dos ministros de exteriores”.
Maateis se remite al carácter de oenegé de ‘Luna Blanca’
para “ser la menos indicada de todas las entidades para
hablar de asuntos islámicos”. Y aunque aplaude su trabajo
con los inmigrantes en Ramadán, “no entiendo su intención de
abrir un gran frente en Ceuta”.
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