Hace dos meses que se bajaba en
telón de la temporada anterior y ya estamos en vísperas del
inicio de una nueva campaña liguera.
Han sido dos meses largos, según se mire, y al mismo tiempo
han pasado las semanas más movidas, por la vorágine de
posibles fichajes, que la mayor parte se quedaron en eso,
"posibles", sin hacerse realidad.
Sin tratar de ser pitoniso y sabiendo que en el fútbol raras
veces dos más dos son cuatro, la liga que comienza mañana
tiene los mismos aspirantes que han tenido las anteriores,
aunque ahora, pero ahora solamente, se postulen otros como
Sevilla y Atlético de Madrid, también, como posibles
candidatos al título.
Se me puede decir que, ahora mismo, el Madrid no parte como
favorito, porque durante la pretemporada ha sido una
caricatura de equipo, sin pegada, sin ideas y sin ganas de
dejarse ver de verdad. Por esta parte sería uno de los que
habría que descartar, pero tratándose del Madrid, hasta el
último suspiro puede hacer cualquier cosa y yo no le
descarto de nada.
El que parte, en teoría, como el gran ganador es el
Barcelona. Por figuras es el grande por excelencia, pero
tantos "gallos" en un solo corral hay veces que más que
beneficiar perjudican y mucho, con lo que los barcelonistas,
en teoría sí, pero en la práctica, ya veremos.
El Valencia debe ser el segundo en discordia, no nos duelen
prendas, sin embargo el pasado año entre las lesiones y la
falta de entendimiento entre las distintas secciones dieron
más problemas de los esperados y entrarán en la Champions
por la puerta de atrás.
Siguiendo a estos, todos los demás, desde el Atlético de
Madrid hasta el Zaragoza, Coruña, ya veremos, Villarreal y
un largo etc. etc.
Ahora, pues, es el momento de las cábalas, de la ilusión,
por muchos, y de ver qué es lo que puede pasar, por parte de
otros muchos.
Lo que sí es cierto es que con la inflación o sin ella, aquí
ya no estamos únicamente en un deporte, aquí, en torno al
balón, se mueven miles de millones y una ruptura en estas
manifestaciones deportivas llevaría al KO en otros muchos
aspectos de la economía del país.
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