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OPINIÓN - JUEVES, 23 DE AGOSTO DE 2007

 

OPINIÓN / EL ESQUINAZO

Líos en el PP
 


Jesús Carretero
jesuscarretero@elpueblodeceuta.com

 

Va a tener razón , mal que me pese, Rodríguez Zapatero, en aquella frase pronunciada en el debate sobre el estado de la Nación, cuando le decía a Mariano Rajoy que le salían competidores por todas partes.

Y es que, aunque Ruiz Gallardón no aspira a ser número 1, al menos de momento. ¡¡Faltaría más!!, lo que sí hace es demasiado ruido, aspirando a ser el “dos” por Madrid, en las próximas elecciones generales.

No está descartado, todavía hay tiempo, de que las elecciones se anticipen al 28 de octubre, a pesar de que el presidente del Gobierno haya dicho, una y mil veces, que serán en marzo.

Lo de la fecha, ahora mismo, es lo de menos, pero lo que sí ha creado revuelo es esa idea, o ese deseo del alcalde de Madrid de estar, también, en el Congreso de los Diputados. Ya sería demasiado, por muy trabajador, muy inteligente y “muy trepa” que es el muchacho.

Ruiz Gallardón habla de su oferta a acompañar a Mariano Rajoy en las listas, y el término oferta casi nos suena a favor, como diciendo “entre dientes” que él daría votos, muchos votos, en Madrid.

Esto último habría que verlo, y digo que habría que verlo porque es cierto que él ha ganado las elecciones municipales con mayoría absoluta, y sin apuros de ningún tipo, pero, claro, hay que analizar el contrincante que le puso el PSOE en Madrid. Como ganó Gallardón hubiera ganado, casi, cualquier otro. Ganó el PP, Gallardón puso su parte, pero no tenía enfrente uno de los pesos pesados del PSOE.

Es más, un hombre que no se hizo ningún tipo de propaganda a sí mismo, Álvarez del Manzano, ganó también varias veces las municipales en Madrid y sacó muchos más votos que Alberto Ruiz Gallardón.

Con estos movimientos, y para echarlos más tierra encima por parte de los adversarios del PP, han tenido que salir a la arena Acebes, Zaplana y Esperanza Aguirre.

Y es que, visto a lo lejos, da la impresión que el actual alcalde de Madrid iba a hacer la travesía en el desierto él solo, y los demás de comparsas. Inaceptable.

Acebes decía hace un par de días en Marbella, cuando se le preguntaba sobre esa posibilidad de Ruiz Gallardón:” cada uno que esté a su trabajo y a la labores que tiene asignadas”. Más o menos se le estaba diciendo que se preocupe de su alcaldía, que haga todo lo que tiene que hacer y que deje en paz la confección de las listas electorales, ya que para su confección hay personas y organismos muy capacitados en el propio partido.

Por su parte Eduardo Zaplana, sobre este asunto dijo:” esto sólo puede propiciar que cada cual empiece a dar rienda suelta a sus aspiraciones o intereses”.

En cuanto a Esperanza Aguirre, no estaba sorprendida, en absoluto. Aguirre y Gallardón se conocen lo suficiente y están tan distantes que es complicado que lleguen a entenderse o a coincidir en algo. Por eso, el “dardo envenenado” que Esperanza Aguirre le envía es este: “ Lo único sorprendente es que, después de que en mayo dijera que no iba a hablar más sobre ello, vuelva a decirlo ahora”. Además, por si no lo recordaba Gallardón, Esperanza Aguirre remata su opinión así:” Las entidades locales tienen una comisión del Senado, que es la cámara territorial, y allí pueden expresarse sobre los temas nacionales que afecten a sus ayuntamientos”.

La cuestión queda muy clara y mucho más cuando la “sombra alargada” de Rodrigo Rato, ya en Madrid, podría ser la que ocupara ese segundo puesto en la candidatura, con lo que las aspiraciones de Ruiz Gallardón, para el futuro, se verían muy mermadas.

Y ahora viene la segunda parte. Si Gallardón dice que “ el PP tiene que presentarse a las urnas con un discurso enérgicamente moderado, y abierto, no sólo a los tradicionales votantes del PP”, está queriendo decir que aquel que vaya el segundo y otros más pertenecerán a los grupos reaccionarios, algo que ni ha caído, ni caerá nada bien a casi nadie, salvo a los que como él coquetean más de la cuenta con algunos medios de gran difusión.
 

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