Los españoles se resisten a canjear las antiguas pesetas, la
moneda de toda la vida, por el euro, esa unidad monetaria
que nos vincula económicamente a Europa y que ha traído más
de un quebradero de cabeza a los bolsillos de los españoles,
sobre todo, por la subida experimentada en los últimos años
sobre los precios del consumo, sin que se haya percibido un
aumento equiparable en los salarios.
Los últimos datos publicados por el Banco de España estiman
en un total de 1.807 millones de euros, las pesetas que
quedan aún por canjear y por tanto, continúan en
circulación. Estas monedas se encontrarían tanto en el
territorio español como en el extranjero, sobre todo, en
manos de turistas y de empresas.
En este sentido, el director de la sucursal del Banco de
España en Ceuta, Francisco Javier Sánchez Pestaña, quiso
resaltar precisamente la especial situación de la ciudad
autónoma en cuanto al canje “diario y continuado” de pesetas
que se percibe.
“Es muy destacado ese goteo continuo de pesetas que nos
llegan diariamente al Banco, para canjearlas por euros. Las
cifras que nosotros barajamos se asemejan a ciudades con más
habitantes como Madrid”, explicó.
Según la sucursal del Banco de España en Ceuta, en lo que va
de año, se han canjeado ya un total de 5.300.000 pesetas en
la ciudad autónoma, (32.000 euros aproximadamente).
“Nos encontramos en un enclave particular, donde destaca la
cercanía con Marruecos, así se explica la cantidad de
pesetas españolas que poseen los habitantes de ese país y el
flujo de canje que realizamos en nuestra sucursal
diariamente, una media de 15 a 40.000 pesetas”, añadió
Fernández.
En cifras
En los seis primeros meses del año se cambiaron en España 15
millones de euros, ya que al terminar el pasado ejercicio,
la cantidad de pesetas por canjear ascendía a 1.822 millones
de euros. Según Francisco Javier Fernández, “se trata de un
flujo de canje cada vez más lento que tardaría
aproximadamente más de 100 años en producirse totalmente”.
Pese a todo, Fernández destaca que la cantidad de pesetas
que aún quedan en circulación en toda España, (1.807
millones de euros) “es prácticamente irrisoria y no afecta
en absoluto al mercado nacional”, concluyó.
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