La reciente colisión entre ‘New Flame’ y el petrolero ‘Torm
Gertrut’ en pleno Estrecho de Gibraltar ha colmado el vaso
de las reivindicaciones que la asociación WWF/Adena ha
efectuado para la protección de esta zona marítima. Esta
organización ecologista solicita a las autoridades
autonómicas y nacionales que reclamen la declaración de
‘Zona Especialmente Sensible’ a la Organización Marítima
Internacional. Una de las funciones de esta institución es
la conservación y la protección de los mares y los océanos
respecto los impactos del tráfico marítimo internacional.
Existe un Subcomité de Conservación que promueve la creación
de estas zonas “más o menos protegidas”. “Tienen que señalar
a los buques y a los capitanes de buques aquellas zonas que
son únicas en el mundo debido a la biodiversidad que
representan”, explica José Luis García, portavoz de WWF/Adena.
La Organización Marítima Internacional define, además, una
serie de medidas asociadas a las zonas protegidas, y al ser
aprobadas, son de obligado cumplimiento para todo el tráfico
internacional.
El Estrecho se quedó fuera
En España existen dos ‘Zonas Especialmente Sensibles’. A
finales de 2004 las aguas de Canarias alcanzaron esta
consideración y anteriormente se calificó a una amplia zona,
a propósito del ‘Prestige’, que engloba un área extensa de
Europa, desde Dinamarca hasta el sur de España. Se denomina
‘Zona de agua del atlántico oriental europeo’, aunque e no
se llegó al Estrecho de Gibraltar por la oposición de Rusia
y otros países, cubre a todo el Cantábrico hasta el sur de
Portugal.
“Hace casi un año y medio promovimos una red de áreas
marinas protegidas, con las zonas más importantes desde el
punto de vista de la biodiversidad. E incluíamos por su
puesto, los fondos marinos ceutíes. Hubo algunos
investigadores, como Óscar Ocaña, que nos estuvieron
ayudando”, apunta José Luis García.
El portavoz de WWF/Adena considera que el tráfico marítimo
en el Estrecho es una de las “grandes amenazas que tiene la
zona”, aunque reconoce que es un tema “complicado”, ya que
el Derecho Internacional avala esta actividad. Esta
normativa impide bloquear o poner cualquier ‘cortapisa’ al
tráfico a través de los Estrechos porque son uno de los
puntos más importantes para la circulación. Y el Estrecho de
Gibraltar es una de las áreas más importantes de circulación
marítima del mundo. “Pero sí es importante primero que se
consiga el reconocimiento de que es un lugar único en cuanto
a biodiversidad y que el tráfico marítimo internacional está
causando graves problemas. Este año hemos registrado cuatro
incidentes y en los últimos tres años, más de 50 casos de
contaminación”, afirman desde WWW/Adena.
|