Es el término más suave que se me
ocurre para tratar de calificar a Jaime Jiménez Arbe, el
“Solitario”. Y lo que me extraña es que haya abogados, con
tan pocos escrúpulos, como para tratar de defender a un
asesino, a un atracador y a un hombre que ha traído loca a
la policía, por las excentricidades que llevó a cabo,
durante muchos años.
Y me indigna que en una nota manuscrita, que entrega a su
abogado, se muestre con tan poca vergüenza,
autoproclamándose inocente. Esto ya no tiene nombre. La nota
dice así:” Yo soy inocente de la muerte de los dos guardias
civiles y de la muerte del policía municipal de Vall d`Uixó.
Es mi palabra de honor. No soy un asesino y si me he visto
obligado a disparar a agentes del orden ha sido siempre
contra mi voluntad y para eludir ... de atención”.
Esta es la declaración escrita a mano del “pollo” en
cuestión. Dice: “No soy un asesino”, con lo que parece que
pretende que se le santifique al angelito de marras y
sigue:” es mi palabra de honor”, este tipo no tiene
dignidad, y su palabra ha sido el uso de las pistolas y el
hacerse con lo de los demás. El término honor sería una
blasfemia si lo asociáramos con gentuza de este tipo. Y como
es un auténtico desvergonzado sigue diciendo:” Si me he
visto obligado a disparar a agentes del orden ha sido
siempre contra mi voluntad”, vamos que el “pájaro triguero”
este nos quiere hacer ver que le mandaron disparar y dar
muerte a los agentes del orden, los propios familiares de
los asesinados.
Con todo esto, ya sería suficiente para que no volviera a
salir de la cárcel, porque además de delincuente e
hipócrita, nos está queriendo hacer pasar por “gilipollas”.
Pero no queda en esto la cosa, solamente, sino que
manifiesta:” Trabajo por la liberación del pueblo español”.
¿Liberación de qué y de quien?. Afortunadamente el pueblo
español con gobiernos de UCD, siendo presidente Adolfo
Suárez o Calvo Sotelo era libre. Con gobiernos del PSOE y
con Felipe González como presidente seguía siendo libre. Con
gobiernos del PP, con José María Aznar, también el pueblo
español era libre y hoy, desde hace más de tres años con
José Luis Rodríguez Zapatero, el pueblo español sigue siendo
libre y lo será por mucho tiempo. Luego no veo la razón por
la que este majadero se quiere erigir en salvador de nadie,
cuando no debiera haber leyes que le salvaran a él de la
cárcel durante muchos años.
El que era asaltante de bancos más buscado, intenta hacerse
una especie de prototipo especial, un Robin Hoad, decía ABC,
de nuestros días y en nuestras tierras.
Y que él se crea algo así, o que de esta manera intente
vender su imagen, aunque detestable, puede entenderse, pero
que sea su abogado el que entre en ese juego es que, el
tunante no tiene salvación, pero el que intenta salvarle no
tiene argumentos legales para afrontar esa defensa.
Decía ABC el pasado viernes que con la descripción que hace
el abogado “ agranda el esperpento en el que se está
convirtiendo el caso del que era el asaltante de bancos más
buscado”.
Todo lo que ha hecho, dar muerte a tres personas, robar en
varios bancos, etc., se debe a una “iluminación” del cielo
que le ha incitado a tales fechorías. Malejo cabrón, que
para exculparse, no sé de qué forma, trata de involucrar a
los demás, sea quien sea, incluido el propio ex presidente
de Extremadura, Rodríguez Ibarra.
Y fuera del “circo” que intentan montar, a lo que tienen
miedo de verdad, “ el tunante” y posiblemente también su
abogado, es a volver a España. El “Solitario” no quiere que
le extraditen a España ante el temor de que lo maten, y para
quitarse toda la culpa y para salpicar a los demás “ acusa a
la mafia marsellesa del asesinato de los guardias civiles de
Castejón”. ¿Habrá más poca vergüenza?.
Creo que, a partir de aquí, todo lo que la prensa hable de
este “tipo” es perder el tiempo, es perder categoría como
periodista y es dar cancha a un insensato, al que tendrá que
aplicar la ley sin piedad un juez.
Todo lo demás es contribuir al jolgorio de este mentecato,
que nada me extrañaría que si le dejan recorriera los
“platós” de televisión en televisión. De verdad, hemos
conocido a muchos impresentables, pero este rompe todos los
moldes.
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