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Marta y Cristina Vela, hermanas gemelas de siete años y
residentes en Villarubia de los Ojos del Guadiana (Ciudad
Real), no podían imaginar el pasado 22 de mayo que la
inundación de su casa les traería hasta Ceuta. Su hermano
Ismael, de 17, y sus padres María José y Jesús mucho menos.
La llamada de una vecina de la familia a ‘Esta casa no es
una ruina’, un ‘reality show’ de Antena 3, que se emitirá a
partir de septiembre, en el que personas con situaciones
complicadas se van una semana de vacaciones a desconectar a
un ‘paraíso turístico’, fue el desencadenante de que los
Vela conociesen la ciudad autónoma.
Llegaron el domingo sin saber dónde venían. El barco fue la
única pista. Y así llevan las últimas cuatro jornadas.Vuelta
en velero, viaje en helicóptero, ruta en el barco de ‘El
Desnarigado’, visita a las Murallas Reales. Y lo que les
queda. “Día a día está siendo una sorpresa. Nunca sabemos lo
que vamos a hacer”, decía ayer el padre. “Nosotras si lo
sabemos, pero sabemos guardar el secreto”, apuntaron las
gemelas al unísono, mirando con complicidad a los
responsables de producción del programa.
La sorpresa de ayer, a partir de las 20 horas, fue doble.
Primero, sentados sobre una toalla en la playa de la Ribera
contemplaron en un ordenador portátil cómo familiares y
amigos derribaban su casa. Su cara era un poema, pero se lo
tomaron con humor. Quince minutos después, de espaldas al
lienzo de muralla y con los oídos bien tapados, aguardaban
otro sobresalto. Cinco ‘quads’ llegaron haciendo ruido y los
pilotos les invitaron a subir. Caballito va, caballito
viene, la familia Vela, aunque fiel a su carácter
campechano, parecía estar ya acostumbrándose a las cámaras.
Después, de vuelta al hotel a esperar lo que diga la agenda
del día. “No tenemos móviles, no podemos contactar con
nadie, esto ya da miedo”, bromeaba la madre.
El padre ya conocía la ciudad
Jesús, el padre, estuvo en Ceuta cuando tenía quince años
con una excursión del instituto. Su recuerdo apenas coincide
con las imágenes que estos días está captando su retina. “Ha
cambiado muchísimo, vinimos a comprar regalos, tabaco,
perfumes, lo típico. Me viene a la memoria la calle Real,
pero nada más”, meditaba ayer entre plano y plano. Para el
resto de la familia, este ‘paraíso turístico’, tal como se
le denomina ‘Esta casa no es una ruina’ y que constituirá el
primer programa del ‘reality’ que se emitirá en horario de
máxima audiencia, esta ciudad y todo lo que la caracteriza
es completamente nuevo. “Yo no sabía nada de Ceuta”, decía
Cristina.
Villarubia de los Ojos, es un pueblo de Ciudad Real, en el
que viven cerca de 10.000 habitantes. El área de trabajo
principal es el campo y las lluvias torrenciales de aquel
día de mayo no lo recordaban los mayores desde hacia setenta
años. Tres calles de la villa hasta arriba de agua. Su
historia, la de los Vela, y su paso por la ciudad autónoma,
quedará para los anales de la televisión.
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reportaje /
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