Si el pasado viernes el presidente de la Ciudad, Juan Jesús
Vivas, comunicó que las obras de la III Fase del Revellín
fueron adjudicadas. Ayer anunció que la empresa encargada de
la ejecución es Dragados y que finalmente se optará por una
vía intermedia, es decir, será “semipeatonal”. Los
ciudadanos y los comerciantes disfrutarán de otra zona
peatonal en la que solo tendrán acceso los transportes
públicos, o sea, los autobuses y los taxis. Esta ejecución
repercutirá lógicamente en el trazado actual del tráfico
rodado que tiene acceso por la plaza de los Reyes.
El dirigente popular sostiene que las obras deben
finalizarse antes de que se inicie la campaña navideña [1 de
diciembre]. Esta es una solicitud expresa de los
comerciantes que esperan que este año las obras no
entorpezcan el tráfico de usuarios a sus negocios en plena
temporada festiva. Otro objetivo marcado por la
Administración local es terminar la rehabilitación de la
Iglesia de San Francisco para la celebración de la
Natividad.
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