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Una mil veces maldita enfermedad
ha truncado la vida de una de las ceutíes de mayor
proyección política. Carmen Cerdeira nos ha dicho adiós en
un día, 2 de agosto, que quedará marcado en el recuerdo no
sólo de la familia socialista desde la que se enganchó a ‘su
gran pasión’, la política, sino en el de la historia de la
propia ciudad.
Miembro de una de las sagas de reconocido prestigio
profesional en el mundo del Derecho; familia que derrochaba
ceutismo y socialismo, María del Carmen Cerdeira siempre
tuvo muy claro que su vocación política, que le acompañó de
su época juvenil, tendría que formar parte de su vida.
Licenciada en Derecho por la universidad de Sevilla, el
conocimiento de las leyes y de la justicia social le
sirvieron para dedicar sus esfuerzos en el mundo del
servicio a los ciudadanos a través de su formación política,
el PSOE. En 1983 alcanzó representación municipal al formar
parte del Pleno consistorial de 25 concejales, hasta que en
el 86 dio el salto a la Cámara Alta. Senadora por Ceuta
durante las legislatura II y IV, fue también miembro de la
Comisión Ejecutiva Federal del PSOE y más tarde
eurodiputada. Alcanzó el reconocimiento como mujer ceutí del
año en 2003 al ser la receptora del ‘María de Eza’ de ese
año. Años antes, demostró sobrada valía como asesora
ejecutiva del Ministerio de Justicia y en la vocalía de las
comisiones de Justicia, de Presupuestos y de Igualdad de
Oportunidades de la Mujer en su etapa como senadora por el
PSOE. Fue miembro de la Asamblea Parlamentaria del Consejo
de Europa después de haber sido la única ceutí representante
y responsable del Gobierno Central en Ceuta.
Su amplísimo curriculum y su dilatada trayectoria, a sus
sólo 48 años de edad, mostraba un futuro absolutamente
prometedor como servidora pública a través de la Política.
Siempre derrochó coraje y valentía en todos los órdenes de
su vida, también en esa maldita etapa en la que compartió
con la enfermedad su ritmo laboral y familiar. En recuerdo
permanente de una ceutí que demostró su amor a la ciudad,
vaya nuestro sentido pésame a la estimada familia Cerdeira y
al PSOE, siglas a las que siempre estuvo unida casi desde la
cuna. Hasta siempre, Carmen. Descanse en paz.
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OPINIÓN / EDITORIAL
