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La playa de La Ribera no es tan extraordinaria como dijo el
presidente de la Ciudad, Juan Vivas, el pasado 4 de julio,
cuando se izaron las banderas azules en esta y en el
Chorrillo que acreditan oficialmente “quecumplen con una
serie de requisitos y condiciones que tienen que ver con la
información a los usuarios, con la calidad de las aguas y de
la arena, con los accesos y con los servicios".
Eso es al menos lo que piensa la oenegé ‘Ecologistas en
Acción’, que ayer dio a conocer su informe ‘Banderas negras
2007. Metástasis costera’, en el que planta una ‘bandera
negra’ en La Ribera. Los argumentos que justifican su
colocación son “la construcción de grandes bloques de pisos
en la zona de Servidumbre de Protección [en la Avenida
Independencia]”, inmuebles que a jucio de los ecologistas
“hacen de efecto pantalla litoral, cosa prohibida según la
Ley de Costas”.
Además, ‘Ecologistas en Acción’ denuncia que “la demarcación
de Costas regeneró artificalmente esta playa sepultando
arrecifes y hábitats de valor ecológico [algo ya denunciado
en reiteradas ocasiones por la asociación Septem Nostra]”.
“También”, prosigue el informe de la oenegé, “dispuso
espigones para contener la arena, la cual no se consiguió
retener provocando la abrasión de las zonas litorales
colindantes”.
Aguas fecales
Por último, la organización de defensa medioambiental
justifica su decisión recordando que en la céntrica playa
ceutí “se producen vertidos frecuentes e intermitentes según
la temporada”. “Se trata”, aclara, “de aguas fecales sin
tratamiento ni depuración a las aguas a través del emisario
del Mercado de Abastos”.
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reportaje / playas
