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Con una gran sonrisa en sus labios el pasado día 9 las
jóvenes Nadia Chaib Adselam y Nora Harrous Mohamed
regresaron a la Ciudad Autónoma, después de ocho días en la
Concentración Nacional de jugadoras promesas y cadetes de la
Federación Española de Balonmano celebrada en Logroño. En
ella, las cuarenta mejores jugadoras del país entrenaron
bajo la supervisión de los entrenadores de la Española en
unas duras y maratonianas sesiones destinadas a incrementar
el potencial de la cantera de nuestro país. Para las
ceutíes, ambas pertenecientes al equipo del Ramón y Cajal,
esta concentración “ha sido dura pero ha valido mucho la
pena”, según aseguró Nora, una de las revelaciones de los
entrenamientos en la capital riojana por su velocidad y
habilidad.
Para ésta, apodada cariñosamente por sus compañeras como ‘la
pulga de España’, vivió su primera experiencia en este tipo
de concentraciones. Una experiencia inolvidable y muy
enriquecedora deportivamente, ya que le ha permitido medir
su nivel frente a las mejores del país.
Por su parte, la otra representante de Ceuta, la portero
Nadia Chaib, sufrió en sus carnes el intenso programa
específico elaborado por los entrenadores para su puesto. La
caballa, ya una veterana en este tipo de ‘stages’, batalló
por sobresalir bajo los palos, ya que se encontró nada menos
que con otras seis guardametas peleando por ser las mejores
de esta preparación. Una dura competencia, fruto de que
todas ellas quieren estar en el equipo que defienda a España
en la próxima Copa Latina y en el torneo Nórdico-Ibérico de
Burgos.
El último integrante de la expedición ceutí, el entrenador
del Ramón y Cajal Yunes Mohamed, fue el gran sorprendido de
la concentración, ya que fue un miembro más dentro del
plantel técnico.
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