La Generalitat de Cataluña ha firmado recientemente un
convenio de colaboración con Marruecos que garantiza el
retorno de los menores no acompañados a su país de origen y,
además, establece un programa de formación de los niños
marroquíes en su lugar de nacimiento para promover una
inmigración controlada. Este es un ejemplo, según el
consejero de Presidencia, Jesús Gordillo, que manifiesta la
diferente vara de medir que utiliza la Administración del
Estado a la hora de facilitar a las comunidades autónomas la
aplicación de este tipo de medidas. “Ahí está nuestra
discriminación y nuestra protesta. Precisamente lo que
queríamos nosotros era asistir a la cumbre que será en
Toledo entre España y Marruecos para exponer nuestra opinión
y también nuestros problemas. No era una cuestión de simple
asistencia porque nosotros tenemos algo que decir, no sólo
para hablar de los convenios sino para ver qué mejoras habrá
respecto los menores extranjeros no acompañados (MENA). En
definitiva todos sabemos que proceden de Marruecos”,
comentó.
En cuanto a las razones que empujan al Gobierno central a
“no conceder” convenios de repatriación de MENA´s desde las
ciudades autónomas, el vicepresidente de Ceuta, considera
que es una cuestión a la que debe dar respuesta el delegado
del Gobierno, Jenaro García-Arreciado. “Es una pregunta muy
buena para el delegado del Gobierno, porque es la
Administración General del Estado quien hace estas
concesiones con otras comunidades como Cataluña o Andalucía
y en Ceuta resulta que no es posible. Nosotros somos España
también, que no se le olvide al delegado del Gobierno”,
reiteró.
Por el momento, un total de once menores, entre los que hay
uno repatriado desde Cataluña, están inscritos en el
programa de formación que llevará a cabo en un centro de
Tánger. En breve, serán devueltos más niños desde tierras
catalanas hacia Marruecos, que además participarán en este
proyecto.
|