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Adolfo Galán, el granadino de 67 años que inició una
protesta hace un mes en la frontera de Ceuta con Marruecos
por no tener permiso judicial para casarse con una joven de
22 años de origen magrebí, abandonó el pasado miércoles su
lucha tras no ver cumplidas sus expectativas de lograr
convencer al juez de Motril que le había denegado el permiso
de matrimonio al considerar que había sospechas de boda por
conveniencia. Galán, que inició la protesta el 12 de junio,
decidió poner fin a esta medida al comprobar que no había
logrado ningún objetivo, aunque dijo que iniciará una huelga
de hambre por él y por todas las personas que viven la misma
situación. Este ingeniero divorciado conoció a la joven hace
tres años en Casablanca y, desde entonces, mantenían el
contacto.
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MATRIMONIO /
CONFLICTO
