Una de las cosas que no soporto es
la envidia. Y no la soporto porque, junto al rencor y al
odio, son los pilares que sustentan el ego de todos esos
personajillos del tres al cuarto. Usan todas ellas como el
escudo protector de sus carencias. Ven en los demás la paja
ajena, sin querer ver la viga que atraviesa sus ojos. De
todos ellos siempre he tratado de cuidarme para evitar
sorpresas mayores que me puedan perjudicar.
No entiendo, como entre los componentes del mismo partido
político, usan como arma la envidia para tratar de
desprestigiar a un compañero o compañera, además alegando
ser su amigo/a del alma. Cómo es posible odiar a quien se
llama amigo/a, por el simple hecho de que ese amigo/a ha
trabajado a destajo en el partido y, por ello, le han
concedido el poder ir en una lista, donde por el número
entregado tenia menos oportunidad de salir de consejero/a
que a servidor le toque la primitiva sin echar ni un solo
boleto. Con amigos /as de ese pelaje, no se necesita tener
enemigos.
El sistema que utilizan, todos estos personajillo para
desprestigiar al que pomposamente llaman amigo/a, es tan
antiguo como la propia humanidad. Se coge a otro de los
envidiosas/as de turno y, como quien no quiere la cosa se le
va “calentando” contándole unas pocas de historietas, en las
que se deje de manifiesto que lo que ha conseguido fulano o
mengana, no ha sido por méritos propios y haber trabajado a
destajo en beneficio del partido, sino por hacerle la pelota
a tal o cual manda. Sin olvidar, por supuesto, decirle al
interfecto o interfecta que tratan de indisponer contra el
amigo/a del alma “Ya ves tú, el mal que yo quiera para él o
para ella que me venga a mi. Es mi amigo/a y lo único que
deseo es lo mejor de lo mejor, pero…”. Y es ahí, con ese
pero, donde echan todo el veneno del mundo. Manda… la cosa.
¿Sé puede ser tan falso/a en la vida?. ¿Cómo es posible qué
estos personajillos del tres al cuarto, sean capaces de
llamar amigo/a, a quiénes están despellejando dejándose
llevar por la envidia?.¿Cómo es posible qué critiquen a
quiénes se han partido el alma trabajando por el partido sin
recibir nada a cambio, mientras estos personajillos se han
visto premiados con puestos para algunos familiares?. ¡Ay!,
amigo guardia, vamos a tener que llamar a los bomberos para
que apaguen ese fuego de la envidia en semejantes
personajillos.
Aquel que piense que estos personajillos no existen, se
equivoca de medio a medio. Estos personajillos existen a
igual que los pelotas, rastreros y lameculos. Son de la
misma calaña. Están cortados por las mismas tijeras.
Y existen desde que el mundo es mundo. Sin ellos quizás el
mundo no podría funcionar. Ya lo dijo el Guerra, no el ex –
vicepresidente del gobierno sino el otro: “Hay gente pa to”.
Dé qué iba a vivir estos personajillos del tres al cuarto si
les quitasen la envida, el odio o el rencor, cuando su
capacidad intelectual está bajo mínimos.
La pena es que, algunos manda, necesitan de ellos para que
le lleven todos los chismes que se cuentan en la ciudad,
para que el alaben y le estén diciendo, cada dos por tres,
que son los mejores mandas del mundo mundial. Las
comparaciones son odiosas, pero el nivel intelectual, de
unos y otros, raya a la misma altura.
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