La Delegación del Gobierno informó ayer que las obras para
el reforzar el dique de cierre de la explanada de la
desalinizadora se han autorizado finalmente. Actualmente,
esta zona se protege con un muro a base de escolleras y
bloques, que debido a los fuertes temporales que azotan, se
ha debilitado e incluso ha desaparecido parcialmente, lo que
ha producido ocasionalmente la entrada de agua y piedras
hasta casi el propio muro de cerramiento de la planta.
Jenaro García-Arreciado, delegado del Gobierno en Ceuta,
anunció ayer que las obras que llevará a cabo Dragados
“podrían comenzar el próximo día 10 de julio”. Los trabajos
consistirán en la colocación de una nueva capa de bloques de
hormigón sobre el manto de protección existente y dotar a la
estructura de un nuevo talud uniforme para todas las
secciones y la construcción de un espaldón de hormigón con
el fin de evitar el rebase. Previamente se cimentará un
fondo con escollera sobre el que se asentará la cimentación
del espaldón. Finalmente, se restituirá el camino y la
urbanización perimetral con características similares a las
anteriores. García-Arreciado comentó que la idea de la
Administración es aprovechar la época estival para comenzar
la obra y que ésta finalice antes de la época de los
temporales de levante. Además, con esta intervención
pretenden duplicar la altura del muro, teniendo en cuenta la
ola máxima registrada en un temporal de levante en la zona.
El Ministerio de Medio Ambiente, a través de la Dirección
General del agua, ha autorizado la ejecución de las obras,
que se han declarado “de emergencia”. El presupuesto máximo
destinado alcanza los 3 millones de euros. La ejecución de
las obras correrá a cargo de la confederación Hidrográfica
del Guadalquivir.
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