El Consejo de Gobierno de la Ciudad Autónoma concluyó ayer
que el Gobierno central ha reincidido en un “error” al no
invitar a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla a la
reunión de la Comisión bilateral Hispano-Marroquí que los
Ejecutivos de ambos países mantendrán el próximo lunes en
Toledo para hablar “entre otras cuestiones, del fenómeno
migratorio y de Menores Extranjeros No Acompañados (MENA)”,
según informó ayer la Delegación del Gobierno a través de
una nota de prensa.
“De entrada nos parece que es de obligado cumplimiento que
Ceuta y Melilla estén presentes en esa reunión porque es
indispensable en materias de este tipo como la atención a
los MENA contar con las ciudades autónomas”, señaló la
portavoz del Gobierno ceutí, quien habló de “gran error” y
de “agravio comparativo” al referirse a la actitud del
Ejecutivo de Zapatero.
Además, Bel desveló que “a primera hora de la mañana [de
ayer]” el vicepresidente de la Ciudad, Pedro Gordillo, había
enviado un fax para mostrar “su malestar” por la no
invitación y para que le aclarasen “si van a asistir otras
Comunidades Autónomas”. El Gobierno le respondió
públicamente a través de una nota de prensa en la que señaló
que sí acudirán “con voz pero sin voto” representantes de
Canarias y Andalucía “por ser las dos regiones que
proporcionalmente tienen el mayor número de MENA acogidos en
todo el territorio español” y trató de contentar a la Ciudad
recordando que “de los resultados de la reunión bilateral se
informará puntualmente a las Comunidades y Ciudades a través
del Consejo Superior de Políticas de Inmigración”.
“Somos interlocutores válidos”
La participación, aún sin carácter ejecutivo, de las
autonomías en la política exterior española fue una
posibilidad que Zapatero dejó entrever para las comunidades
limítrofes con Estados extranjeros antes de llegar a La
Moncloa, aunque no se ha concretado con Ceuta y Melilla. Sí
han sido invitadas, sin embargo, asiduamente Canarias y
Andalucía a los encuentros con Marruecos, así como también
Extremadura o Galicia a los mantenidos con Portugal.
El líder de la oposición, Mohamed Ali (UDCE-IU), lamentó el
paso de “otra oportunidad perdida” para dos ciudades que,
según destacó, “deben considerarse dos interlocutores
válidos al menos para expresar su opinión sobre estos temas
u otros que les afectan tan directamente”.
El PSPC denunció “el ninguneo” a Ceuta y pidió a la ciudad
una “respuesta contundente”.
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