El pasado fin de semana, Antonio Escamilla fue cesado como
vocal de la Federación de Árbitros de fútbol-sala, tras doce
años en este cargo, por Antonio Soto, presidente del Colegio
de Árbitros de Ceuta.
Para Escamilla, su cese “es improcedente, puesto que, a mi
parecer, la decisión del presidente del Colegio de Árbitros
es suficiente para que se pueda hacer efectiva, ya que hay
estamentos, como el Comité de fútbol-sala y la Federación de
Fútbol de Ceuta, que están por encima de ella, y de la que
depende”
De hecho, según declaró el ex-vocal “ayer mismo tuve una
reunión con el presidente de la Federación de Fútbol, Emilio
Cózar, y ni siquiera a él le habían comunicado que yo iba a
ser cesado de mi cargo. Es decir, que la propia persona que
fue quien delegó en mí el cargo que he estado desempeñando
en los últimos doce años dentro de la Federación de
Árbitros, no tenía conocimiento alguno de que había cesado
del mismo”.
Por otra parte, Antonio Soto afirmó que “no se ha cesado a
Escamilla de la Federación, sólo de su labor dentro de ella.
En la misma reunión en la que le informé de esta decisión,
le comuniqué que estaban a su disposición varios cargos,
como el de director de la Escuela de Árbitros de
fútbol-sala, el de profesor de la Escuela de Entrenadores de
fútbol, o el de informador. Sin embargo, rechazó los tres”.
Escamilla, quien declaró que había sido cesado por supuestas
irregularidades y anomalías en algunas actas de partidos de
fútbol-sala, se citó ayer con el resto de sus compañeros en
el mismo Colegio de Árbitros, tras haberlo intentado el días
anterior sin éxito por encontrarse la puerta cerrada y
cambiada la cerradura, según afirmó, para comunicarles la
decisión del Comité de Árbitros y despedirse de ellos
formalmente.
Antonio Soto no contempló, sin embargo, esas irregularidades
como motivo de su cese. “Se ha cesado porque entiendo que ha
cumplido una etapa dentro de este estamento. Ha estado como
vocal durante doce años y ahora hace falta un cambio radical
en el fútbol-sala de nuestra ciudad. Creo que Escamilla no
es el idóneo para llevar ese trabajo a cabo, y ya hay una
persona para ello”, subrayó.
Y es que el encargado para sustituir a Escamilla como vocal
de la Federación de Árbitros ya tiene nombre y apellidos.
Aurelio Moya Luque ha sido el hombre designado por Antonio
Soto para llevar a cabo ese cambio dentro del fútbol-sala
caballa. “Aurelio es un hombre que ha estado toda su vida
ligada a este deporte. Ha sido jugador de fútbol en Liga
Nacional y Tercera División, durante siete temporadas fue
delegado del Puerto, el Ceutí y el Ángulo, todos ellos
equipos de fútbol-sala, y desde hace un año ha estado
dirigiendo partidos tanto de fútbol como de fútbol-7, por lo
que no es en ningún caso un desconocido ni del fútbol en sus
distintos niveles ni del arbitraje”, concluyó.
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