La vuelta a la senda de las relaciones institucionales del
principal partido de la oposición salido de las urnas ha
sido una buena noticia para la portavoz del Gobierno de la
Ciudad, Yolanda Bel. Esta consideró ayer, tras el Consejo de
Gobierno, que “el paso dado por Mohamed Alí supone que ha
recapacitado” y admitió que el que este se haya decidido a
retomar las relaciones institucionales “me parece un gesto
de responsabilidad”.
Bel consideró que el paso dado por Alí es el fruto de una
“reflexión acertada”. Así, la portavoz calificó la actitud
del líder de la UDCE de “coherente y responsable” así como
una postura que “es una obligación que debe el grupo al que
pertenece para con la Asamblea”.
Yolanda Bel reconoció que fue crítica con la actitud de
ruptura que llevó a cabo el líder de la Unión Demócrata
Ceutí y su partido al que luego se sumó también el otro
grupo localista de corte musulmán de la Asamblea, el Partido
Democrático y Social de Mustafá Mizzian. “En su día dije que
me parecía una irresponsabilidad” la actitud que
manifestaron estos dos partidos, espetó la portavoz popular.
El razonamiento usado por Bel para la crítica velada que
realizó fue el considerar que con su actitud al dejar de
acudir a actos institucionales estos estaban incumpliendo
con parte de su cometido como diputados de una Asamblea
salida de unas elecciones. “Estar presente en actos de
carácter institucional es una de las obligaciones de un
diputado”, recordó la portavoz popular.
Cabe recordar que las relaciones del primer partido de la
oposición con el Gobierno de la Ciudad permanecían rotas
desde hace casi un año cuando el consejero de Presidencia,
José Luís Morales, acusó al líder de la UDCE, Mohamed Alí,
de “querer marroquinizar Ceuta”. Así, a parte de no acudir a
actos institucionales de la Ciudad, el principal partido de
la oposición en la Asamblea dejó de participar en la
Comisión de Reforma del Estatuto de Autonomía de Ceuta.
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