Tras dos meses de espera, la familia de Juan I de Portugal
ya tiene nuevo domicilio. Se trata de una casa situada en la
zona centro de la ciudad y que “cumple con todas las
necesidades de accesibilidad y características que
demandaban estas personas, debido a que uno de los miembros
de la familia estaba afectado por problemas de salud que le
limitaban en gran medida su movilidad”, explicó la consejera
de Bienestar Social, Yolanda Bel.
Desde el pasado lunes esta familia de cuatro miembros, que
vio como un 27 de marzo, sobre las 17:00 horas, una máquina
excavadora que realizaba obras de demolición en un solar
anexo, chocaba con una de las paredes de su vivienda y
provocaba el derrumbe de un gran parte de ésta, ya está
alojada en una casa y no en las habitaciones de un hotel,
como lo habían estado haciendo hasta la fecha.
Aquel día, pese a la rápida llamada de alerta que realizaron
los dueños de la vivienda tras el incidente, el equipo de
bomberos no pudo hacer nada y finalmente tomaron la decisión
de demoler la casa en su totalidad, debido a los posibles
peligros que podía entrañar para el resto de vecinos de la
zona y para los propios dueños del inmueble.
Desde aquel día, largas y en su mayoría infructuosas fueron
las negociaciones entre la abogada de la familia, la Ciudad,
y la empresa constructora para conseguir un nuevo
alojamiento para estas cuatro personas.
Finalmente y tras varios ofrecimientos que no terminaban de
convencer a la famlia, la Consejera de Bienestar Social
informó de que habían aceptado una vivienda en el centro de
la ciudad y que la empresa que provocó supuestamente el
accidente, ya se había comprometido por escrito a pagar el
alquiler de dicho alojamiento hasta que dicha familia pueda
optar a una vivienda de protección oficial de las que
promueve la Ciudad.
“Esta familia deberá cumplir todos los requisitos exigidos
por ley para optar a una vivienda de protección en
propiedad. No habrá ningún tipo de distinción ni de trato
favoritario”, aclaró la consejera, Yolanda Bel.
|