A la mayoría de propietarios de casetas de la Feria del
Libro 2007 les ha pillado desprevenidos el éxito de ventas
de ‘La catedral del mar’, de Ildefonso Falcones. La visita
del escritor novel a la ciudad autónoma dejó sin género a
varias librerías que confirman esta publicación como la más
vendida en el ámbito local. En segundo lugar ha quedado ‘El
pedestal de las estatuas’, de Antonio Gala. Todo un clásico
super ventas de las ferias literarias españolas. La lista de
la compra que sigue va desde los libros infantiles, pasando
por el último libro de cofradías de Ceuta, hasta los
manuales de ‘autoayuda’. Una amplia gama de publicaciones
que han contado, en general, con unas cifras de venta
razonables gracias, según los libreros, a la vuelta del
evento a su emplazamiento tradicional, la plaza de los
Reyes.
Su céntrica ubicación y la variedad de actividades que se
han desarrollado (teatro de títeres, conciertos
multiculturales, obra en homenaje a Luis López Anglada, ...)
han sido condición sine quanon para la buena marcha de la
feria actual. Los doce empresarios, sin excepción, aseguran
mayores ventas en 2007, que en 2006, cuando se celebró en la
plaza de África. Por ello, hacen una llamada a preservar,
para próximas ediciones, la ubicación de este año.
Aunque ‘La catedral del mar’ ha sido el libro protagonista
indiscutible de la feria, la particularidad de cada librería
ha hecho variar el tipo de publicaciones más vendidas, según
cada caseta. Alfonso Jaén, responsable de ‘El Hogar de la
Biblia-Sociedad Bíblica’ apunta hacia ‘Explorando el código
Da Vinci’ como el libro con mayores ventas. Una obra que
trata de refutar las teorías de Dan Brown sobre la Iglesia.
“Todo lo que se dice en ese libro es erróneo y, dada la gran
cantidad de católicos que viven en Ceuta, ha tenido mucha
aceptación”, explica el encargado de esta librería
especializada exclusivamente en publicaciones católicas,
“para predicar el Evangelio”, eso sí, en todos los idiomas.
Con un tipo de público objetivo similar, pero abarcando
todas las religiones de ‘notorio arraigo’, la ‘Librería
Diocesana’ ha tenido en la más reciente publicación sobre el
mundo cofrade de la ciudad, sus mayores cifras de ventas.
“25 o 30 ejemplares, a un precio como el que tiene
‘Hermandades y Cofradías de Ceuta’, es un índice muy alto”,
asegura la gerente, Cecilia Abbate. El segundo más vendido y
en alza cada año es la traducción del Corán al castellano
que “cada vez se vende más porque la población cristiana
tiene curiosidad y la musulmana, que maneja el Dariya, no
habla, en general, árabe a la perfección”. Y subraya, “no
obstante, lo más grave es que en Ceuta se lee poco”.
Despedida y cierre
Otro de los que coincide con el escaso interés por la
lectura local es Guillermo Dámaso, gerente de la tienda de
cómics ‘Mazinguer Zeuta’, recientemente cerrada por falta de
ventas. Su asistencia a esta edición de la Feria del Libro
tendrá forma de punto final y se basa, primordialmente, en
vender material que quedaba en stock. “Estamos vendiendo
mucho, sobre todo cómic infantil, pero es puntual, en dos
años con la tienda, no nos ha ido tan bien”, lamenta. Las
dificultades con la distribución y la escasez de un público
fiel al comercio han reventado las expectativas de este
joven empresario que cree, además, que “tampoco los padres
ayudan a leer”.
No obstante, el grueso de casetas manifiestan haber vendido
multitud de material infantil. Sean cómics, libros para
colorear o dvd´s de ‘La Biblia para niños’. Así lo confirman
desde ‘Currito’ que, por tercer año, pone un puesto en la
Feria del Libro. “Los libros y cuentos para niños han sido
los más solicitados”, dice Manuel Blasco, que también ofrece
dvd´s de clásicos del cine. “No hay un producto exclusivo de
venta”, añade Isabel Blasco, responsable conjunta de la
librería.
Una variedad de gustos constatada que, en el caso de ‘Krispi’,
regentada por Minu Sunderdas y ‘África Tótem’, por África
García, redunda en el enorme tirón de Ildefonso Falcones.
Ambas empresarias han sido preguntadas por ‘La catedral del
mar’, en decenas de ocasiones. “Es el rey de las ventas en
2007”, asegura García. “Yo me quedé sin existencias”,
apostilla Sunderdas.
Un panorama variopinto que las librerías esperan mantener en
la plaza de los Reyes. Eso sí, con más toldos para
protegerse del sol. Todas las empresas vieron desde el
primer día, que la plaza es el sitio definitivo.
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