El restaurante La Cantina, que ha inaugurado esta semana su
nuevo establecimiento junto al Parque del Mediterráneo, ya
está empezando a notar las ventajas de esta nueva
localización, más céntrica y transitada por aquellos que
buscan buena comida fuera de casa.
Después de dos meses de trabajo desde que dejaron su antiguo
local en el Parque Comercial de Ceuta, su propietario, Pedro
Castillo, y el resto de la plantilla se muestran ahora
satisfechos y expectantes ante el cambio que supone el
traslado. “Estamos muy contentos con la respuesta de los
primeros días y vemos como en un día semanal como hoy
(jueves) hemos estado casi llenos a la hora de comer”,
comenta.
El nuevo restaurante, de 30 mesas, tiene capacidad para 125
personas y un acceso directo al Parque Marítimo que le
asegura la afluencia de clientes durante todo el día una vez
que la temporada esté en lo alto. Para Castillo, es
importante mantener contentos a sus clientes habituales, que
han sido “muy leales” al restaurante desde que empezó a
funcionar en Parque Ceuta. Así, en el nuevo local, han
dispuesto varias zonas diferenciadas para dar cabida a todo
tipo de clientes, desde parejas o grupos de amigos, hasta
familias con niños.
Varios ambientes
Dentro del local, “la frontera” separa el ambiente de
México, con luz más cálida, colores e iconos del país; de la
zona de Estados Unidos, donde nos recibe una figura de Betty
Boop y una gran Harley-Davidson de los 80 restaurada
especialmente para la ocasión. Finalmente una zona más
abierta y de techos altos da acceso directo al Parque, donde
este verano muchos se sentarán para tomar algo refrescante.
Castillo explica que uno de los secretos de su éxito, es la
frescura de sus ingredientes y la oferta de comida casera,
de elaboración diaria. Y para los que no se atrevan con la
comida mexicana, añade que deben animarse, “ no es una
comida fuerte, hemos tomado las recetas e ingredientes
mexicanos pero hemos hecho una adaptación a los gustos de la
zona, por lo que a casi todo el mundo le gusta”.
Las fajitas y quesadillas son algunos de los platos más
típicos que se pueden degustar en el local, también desde
ensaladas ligeras hasta el plato fuerte, costillar de cerdo
especiado a la brasa. Según comenta Castillo, los platos se
sirven con tres salsas, picante, tomate y barbacoa, por lo
que cada comensal puede adecuar la intensidad del sabor a su
gusto. La Cantina permanecerá abierta desde ahora, de 12 de
la mañana a 12 de la noche durante todo el verano.
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