Se celebraron las elecciones y, en
esta tierra nuestra, no ha saltado la sorpresa, todo lo que
iba a suceder estaba más cantado que “macarena”. Aquí la
única duda existente era saber cuántos diputados iba a sacar
Juan Vivas, si conseguiría repetir el número o perder alguno
de ellos, por aquello del desgaste que produce el gobernar.
Nada ha sucedido y todo continúa igual, diecinueve diputados
para Juan Vivas, cuatro para UDCE ´- IU y dos para el PSOE.
El pueblo se ha volcado masivamente en votar a Juan Vivas,
porque le guste o no al candidato del Partido Popular, el
auténtico vencedor de estas elecciones a igual que en la
anterior, tiene nombre y apellidos, Juan Vivas. No hay más
cera que la que arde. Siempre lo he dicho y lo voy a seguir
manteniendo, el pueblo vota masivamente una y otra vez y
todas las veces que se presente, a su ídolo y ese ídolo es
Juan Vivas.
Sé lo que algunos de ustedes me pueden decir, que a pesar de
todo cuanto yo diga, el vencedor ha sido el Partido Popular.
Y, por supuesto, no voy a negar que como partido político a
sido el vencedor, pero por que ha contado con Vivas. Si
Vivas se hubiese presentado por otro partido, incluido un
partido independiente fundado por él mismo, esos diecinueve
escaños, con toda seguridad, hubiesen sido para él.
La coalición UDCE – IU, ha ganado un diputado arrebatándole
el mismo a Mizzian con lo que, de nuevo, vuelve a ser la
segunda fuerza política de nuestra tierra. No cabe duda
alguna que la coalición ha conseguido los objetivos marcados
e incluso ha ganado un diputado más. Lo que para la
coalición es un auténtico triunfo.
El PSOE pese a los esfuerzo de su secretaria general y
candidata a la Asamblea, Toñy Palomo, no ha conseguido
superar al barrera de los dos diputados, volviendo a repetir
el mismo número de diputados de la anterior elección. Lo que
se puede considerar, sin duda alguna, como un fracaso de los
socialista ceutíes. Ese fracaso ha sido le que ha llevado a
Toñy Palomo a presentar su renuncia como secretaria general
de los socialista ceutíes.
No hace muco tiempo, desde estas mismas páginas, advertíamos
a la candidata lo que le sucedería de no sacar, al menos, el
doble de diputados con los que contaba en las pasadas
elecciones. Nadie reconocería ni los sacrificios ni el
trabajo realizado a lo largo de un a legislatura, porque lo
único que le piden los partidos políticos, a sus candidatos,
son resultados y si estos no se consiguen, palmadita en las
espaldas, agradecimiento por los servicios prestados y adiós
que te vaya bien.
Algunos de los componentes de tu equipo han cometido
errores, algunos de ellos de auténtico bulto, incluida hasta
negarle la publicidad a quienes mejor te habían tratado. Y a
parte del trato de mi periódico, siempre correcto, el que te
hemos dado dos de sus colaboradores. La verdad, esa
negativa, Toñy no la entiendo. En fin, como aguas pasadas no
mueven molinos, te deseo toda la suerte del mundo en el
nuevo camino que emprendas alejada de responsabilidades
políticas.
En fin amigos míos, como aquí nadie pierde y todos ganan,
pues mañana hablaremos del único que no hay forma de que
gane.
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