Si hay algo en la vida que me
encanta, es adelantarme a los acontecimientos y sentir la
satisfacción de acertar, una vez más, en mis predicciones.
Mi intuición, esa que te da el haber aprendido en la mejor
universidad del mundo, al adelantarme a los acontecimientos,
me viene a demostrar que estoy en perfectas condiciones
físicas y mentales. Vamos, como decía Tony Leblanc, estoy
hecho un mulo. Cosa esta, la de estar en tan perfecta
condiciones, no le va a gustar más de uno que desearían todo
lo contrario. Lo siento por ustedes, mis nunca bien ponderas
criaturitas mías, pero el único consuela que les queda es
ajo y agua, Ya saben a jod… y aguan…
La sabia de mí abuela, porque mí abuela era sabia,
acostumbraba a decir: que sabe más el diablo por viejo que
por diablo. Y uno, aunque no le guste la cosa de hacerse
viejo, eso a nadie le gusta, pues se va haciendo cada vez
más viejo. Ahora, eso sí, no me ha pasado como a aquellos
que se les ha parado el reloj en el tiempo, el menda va con
los tiempos que corren y el reloj en su hora justa, ni
minuto más, ni minuto menos. Lo que es todo un detalle.
Dije y escrito está, porque las palabras se las lleva el
viento, que no tardarían nada en salir a la palestra todos
aquellos a los que, según sus propias teorías, deberían
contar con ellos a la hora de repartir los cargos, incluso
alguno de ellos, el más pelota en el asunto, soñaba con ser
senador.
Y como la vida tiene esas cosas que nunca fallan, como es la
intuición de todos los aprendimos en esa maravillosa
universidad que es la calle, pues para no dejarme en mal
lugar, cosa que les agradezco en lo que vale, el más pelota,
el de las visitas diarias al manda, la eminencia gris de los
intelectuales del peloteo, al comprobar que su sueño era
solo un sueño, que para eso los sueños , sueños son que ya
lo dijo el de la barca, rápidamente ha destapado el tarro de
la mala “milk” que atesoran todos estos “genios” del peloteo
que, además, algunos de ellos, como es el caso que nos
ocupa, se creen alguien dentro del mundo de la
intelectualidad y no ha dudado, ni un sólo momento en
arremeter contra sus amigos del Partido Popular.
Por cierto, tengo que decir y digo que, en todo momento, se
ha sentido animado y respaldado por otro pelota del mandas,
el del aro del cubo marcado en el culo, en esa lucha contra
ese partido a quien tanto le deben ambos dos. Por supuesto
nada de meterse con el manda que es amiguete y, bueno por
qué no decirlo, socio del personajilo que tiene el aro del
cubo marcado en el culo. Y, desde luego, jamás va a
permitir, que para eso él también es otro manda la menor
broma con su amiguete y socio. Un socio, por la gracia de
Dios, al que hay que cuidar mucho, que no está el negocio
para enfadar al manda de los mandas.
Ahora, eso sí, permitido está darle caña a Juan Vivas, que
eso no va a enfadar al manda de los mandas, socio y amiguete
que le puede sacar las castañas del fuego en cualquier
momento. Y, por tales motivos, el lacayo se ha lanzado
contada virulencia a criticar al actual presidente de la
Ciudad Autónoma, entre los aplauso del manda de los mandas y
el del aro en el culo. Ambos dos mandas, seguro que le dan
a, Juan Vivas, el abrazo de Vergara. ¡Hipócritas!
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