Los debates
 

Jesús Carretero
jesuscarretero@elpueblodeceuta.com
 

Hay veces que pueden ser interesantes, cuando dos o más grupos tienen que dilucidar unos votos que les pueden llevar al poder o a quedarse en la oposición.

Sin embargo, en otras muchas ocasiones no son más que el intento de dejarse ver, por parte de aquellos que no hacen ni sombra en la campaña, y que están sin posibilidades de lograr nada más que la publicidad que se vayan haciendo.

Llevo varios días oyendo que hay grupos que quieren debatir con el PP, y la primera pregunta que hay que hacerse es ¿Debatir qué y con quienes?, porque ahora mismo, por mucho debate que haya, al PP no le van a quitar ni un escaño, que los tiene bien amarrados y un grupo como el PSOE o PSPC poca renta podrían sacar de su enfrentamiento con Juan Vivas.

Mal, muy mal, haría el PP si entrara en ese batiburrillo, cuando lo tiene todo ganado y con rentas más que suficientes para ganar por goleada En un debate de esos, por mucho que María Antonia Palomo quisiera sacar tajada, no iba a lograr más que sacar de naja, un día más, ese esperpento que se viene mostrando desde el primer día de campaña. Y lo mismo que digo de María Antonia puedo decir de José Luis Aróstegui: de aquí poco podríais sacar.

Al mismo tiempo veo que Mohamed Alí que va a lo suyo, está haciendo una campaña muy digna y saben el terreno que están pisando para lograr sus objetivos. No me fío de las encuestas y por ello pienso que muchos de los avances son meras especulaciones, que casi nunca se igualan con lo que sale en las urnas. Mohamed Alí y su grupo saben donde están aunque sigo pensando que se han equivocado de acompañante y que nada les va a favorecer “ el rojerío” de IU. Aquí sí puede haber habido error de base en esta candidatura para la campaña electoral.

Los Verdes están en su línea, no buscan mucho y creo que van a encontrar menos, pero no están creando problemas en la campaña y es casi imposible que logren un escaño, ni aunque se den siete milagros juntos.

El debate que sí podría ser interesante, porque ambos están sobre el mismo terreno, sería el que dirimieran María Antonia y Aróstegui. Aquí sí, el que convenciera más podría lograr ese escaño que no tiene, o la parte que le falta para llegar al tercero, en el caso del PSOE. ¿Por qué no se lanza a este ruedo Mª Antonia Palomo, ni tampoco Aróstegui? La pregunta es fácil de responder, porque la verborrea en uno y en otro iba a dejar en claro como ambos están en distintos grupos, pero con discursos cercanos, y tan poco llevaderos que nadie les creería nada de lo que prometieran.

Fuera de esto, nada de nada. Ayer me encontraba con uno de los miembros de la candidatura del PSOE y me aseguraba que un debate con Juan Vivas les podría proporcionar a ellos bastantes votos. Mi opinión, la misma que estoy mostrando, es que Vivas tiene los votos suyos, digo suyos de él, no todos del PP y esos votos son inamovibles.

María Antonia, o Aróstegui, nada teneis que hacer, con debates o sin ellos y por lo único que podeis luchar uno y otro es por esos 200 o 300 votos que si caen del lado de Aróstegui le darán un escaño, y si caen del lado de Maria Antonia la dejarían con los dos o incluso podría llegar a 3, difícil que se dé esto último.

Y aquí viene la primera reacción tras las votaciones: Si en el PSOE no se consiguen más de los dos escaños, o incluso con esos dos el domingo por la noche tendrá que haber dimisiones, y no debe empezarse por otra parte más que por la secretaria general que empieza ya a estar en entredicho dentro y fuera del grupo socialista. Alguien del partido, aunque no de mucho peso, me decía el domingo por la tarde:” Otro fracaso más no lo puede soportar el PSOE aquí en Ceuta. El PSOE está acostumbrado a ganar en muchísimas ocasiones, con lo que dos desastres seguidos es algo que no entra en las categorías de este partido, y la primera solución va a ser cambiar la cabeza de dicho partido.

Mirandolo bien, es ingrato esto de la política, y más si no hay el talento suficiente como para saber hasta donde se puede llegar y hasta donde te van a dejar los contrarios. Aquí, en estas elecciones la situación está tan clara que la goleada ya es segura, lo que hace falta es saber por cuanta diferencia.