El Atlético de Ceuta arañó en el descuento del partido ante
el Mairena un empate que sirvió para quedar durante unas
horas pendientes de un hilo que acabó por romperse al ganar
el Xerez ´B´.
Ante los alcoreños los de Jaco Zafrani salieron decididos a
por el triunfo y fueron los primeros en intentarlo por medio
de Alejo. Tras el extremeño sería Rabeh quien a los nueve
minutos obligó a Raúl a abortar un remate en dos tiempos. La
siguiente fue de nuevo para Alejo tras un buen pase de Tote,
pero el artillero ceutí disparó alto y desviado.
El Mairena con numerosas ausencias se afanaba por hacerse
con el balón sin demasiado éxito. En el 19, Baena Herrera, a
instancias de su asistente, anuló correctamente un gol de
Cisco por fuera de juego, jugada que, sin embargo, teminó de
despertar a los anfitriones ante un Atlético de Ceuta falto
de pegada.
En el 27, un mal despeje de Joselete habilitó al propio
Cisco, que pidió manos de Marcelino en el área que no vería
el colegiado.
Los ceutíes volvieron a apretar en la recta final de esta
fase, pero sin fortuna. A diez del descanso, Víctor abortó
como pudo un chutazo de Marcos, mientras que Dani Pérez hizo
emplearse a fondo a Raúl en la siguiente jugada, aunque el
guardameta logró despejar a córner con la yema de los dedos.
La segunda parte sí empezó de forma fulgurante, con un
Mairena que parecía tener energías renovadas y un Atlético
de Ceuta algo dormido. Cisco, en semifallo, avisó a Ezequiel
en el 49, pero fue Orife el que rozó el 1-0 dos minutos más
tarde.
Al filo del cuarto de hora, Orife se marcó la mejor jugada
del partido, yéndose con calidad de varios contrarios para
lanzar a bocajarro y que Ezequiel despejara con apuros a
córner. Más cerca si cabe lo tuvo el ex sevillista en el 64
después de que una gran penetración de Gonzalo por la
derecha acabara en un pase de la muerte que el ‘9’ alcoreño
mandó arriba a bocajarro.
Gol anulado a los caballas
En el 72 llegó la polémica con un gol anulado a Alejo por
una falta al portero que no existió cuando a Raúl se le
escapó el balón de las manos y éste terminó dentro de la
portería.
Rabeh, en un mano a mano con el cancerbero local, rozó
también el tanto a diez minutos del final, pero se impuso el
blanquinegro. El choque se decantaría del lado local en el
84 después de una jugada personal que Orife aprovechó para
definir de forma brillante tras regatear a Ezequiel.
Cuando parecía que peor lo tenían los rojiblancos, en el
tiempo de descuento, el colegiado señaló un penalti de
Víctor Gago a Lema que el propio central rojiblanco
transformó en un empate que daba un efímero hilo de vida a
los caballas.
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