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No se puede penar el pensamiento.
Ni someter los sentimientos a medidas restrictivas por parte
de terceros. Tratar de hacerlo es como poner barreras al
océano y acotar los cielos. ¿Qué preguntan? ¿Si me he visto
atacada en mi libertad de opinión o de expresión? Bueno, me
vi seriamente amenazada de muerte en su día por la
Inquisición Rosa y todo tramado desde Ceuta, aunque dejo que
la Udyco investigue, aunque, siempre he dicho que ser
tiroteada por un terrorista “auténtico” tiene las ventajas
de que, tu familia, se apunta a la AVT y recibe apoyo y
subvenciones, mientras, que ser degollada por un depravado
no tiene ninguna compensación. Aunque sí respuesta, porque,
si a mi me pasa algo tengo netamente identificados y
denunciados a los inductores.
Pero, por lo demás, quitando el acoso pseudoterrorista de
los maníacos, no me he visto coartada en mis libertades y,
personalmente, nunca he puesto coto a pensares y sentires.
Por eso pienso que, el rifirrafe de las listas de la ANV no
merece la pena. De hecho he realizado una tirada de tarot
con los arcanos mayores y la estrategia gubernamental me ha
aparecido sobre el tapete: se trataba de ilegalizar unas
cuantas listas, para calmar al populacho, pero darle
cuartelillo y vidilla a otras tantas listas de batasunos,
para apaciguar a ETA y no enconar a los asesinos. Blanco y
en botella. Es así y no de otra manera. Pero no pasa nada.
Cuando gobierne el PP le aplicará al ANV y colaterales la
Ley de Partidos, las ilegalizará como en su día ilegalizara
a los batasunos , un puñado de inútiles dejarán de medrar en
lo ayuntamientos y se irán de nuevo a tomar directamente por
el culo, dicho sea con todo respeto, mejorando la presente y
sin ánimos de señalar. Porque la gente es muy mala y hay
mucha envidia en el mundo. ¿Qué murmuran con expresión
escéptica? ¿Qué sobran dichos y refranes? Ustedes lo que son
es unos revolvedores y si quieren ser salvados a la hora de
la muerte, cuando acudan los demonios a llevarles al otro
lado del río, tienen que hacer como el personaje del poema
de Berceo, decir a diario al salir de sus casas “Ave Santa
María, que pariste Mesías” ¿A ver, quien tiene en el
Universo idioma de raíces literaria tan arrebatadoramente
hermosas como el español? Cuatrocientos millones lo hablamos
y rezamos utilizando su musicalidad y ante esa evidencia se
me borra momentáneamente la hostilidad que despiertan en mí
las listas de ANV, las amenazas mafioso-rosadas y los burdos
apaños del Gobierno para conseguir, de una vez, que nuestro
Zetapé sea el factotum de la célebre “paz” y capitalice el
asunto en las urnas. Pero ha fallado la estrategia y se está
dando una nefasta imagen.
¿Un ejemplo del rechazo popular? Pues los conciertos de la
Pantoja, treinta mil personas en Valladolid y cincuenta mil
en las fiesta de San Isidro en Madrid. Sale la tonadillera
cantando “Francisco Alegre” y la gente delira, porque, el
público sabe que está haciendo mucho más que vitorear a la
reina de la copla. Pensares y sentires.
Pensamos que cada ¡ole! Es una morisqueta a los chanchullos
gubernamentales, cada ¡Viva España! Es una autoafirmación
ante la marranada nacionalista, cada pasodoble torero un
reafirmar nuestra cultura. La Pantoja se ha convertido en un
icono en una Patria huérfana de símbolos que no sean la roja
y gualda y el toro de Osborne. ¿Qué gruñen? ¿Qué si tengo
algo que añadir del águila de San Juan? Si. Que es el
emblema de Sus Católicas Majestades Isabel y Fernando. Y es
nuestra. Porque es nuestra Historia y para arrebatárnosla
nos tienen que sacar las tripas o tomar algún tipo de medida
igualmente disuasoria y sangrienta. Lo pienso, lo siento y
lo digo y les invito a que siempre hagan lo mismo porque,
quien trate de castigar o reprimir nuestros latires y
sentires e como si tratara de acotar el firmamento.
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OPINIÓN / ESPAÑA CAÑÍ
