Cada semana llegan a distintos veterinarios de la ciudad
docenas de gatos en condiciones de deshidratación,
hambrientos y enfermos, muchas veces víctimas de pequeños
accidentes callejeros. Este es un problema que necesita una
solución lo antes posible, puesto que si no se hace nada,
cada vez son más los animales afectados y consecuentemente,
disminuye la capacidad de centros de acogida para tratarlos.
José María Jiménez, de una clínica veterinaria de la ciudad,
conoce bien el problema puesto que a pesar de trabajar en
una consulta veterinaria privada, recibe cada semana gatos
abandonados que necesitan atención, de parte de personas que
los encuentran en las calles, indefensos.
En la jornada de ayer llegaba un gatito que había sufrido un
accidente. Sufría de problemas de respiración y había
perdido la movilidad en las patas traseras, además de
encontrarse muy débil, asustado y dolorido.
José María Jiménez accedió a acoger al pequeño animal por
unas horas, hasta que el centro municipal de acogida pudiera
hacerse cargo, durante las siguientes horas de la tarde.
“Este es un problema de todos”, afirmó el veterinario, “no
es mi responsabilidad ni la de la persona que se pueda
encontrar un animal en estas condiciones en la calle, sino
que es el Ayuntamiento el que debería aprobar medidas que
detengan esta situación”.
Medidas aprobadas
Jiménez explicó que en ciudades como Roma se han aprobado
recientemente medidas por las que se pretende castrar a los
gatos callejeros para hacer que disminuya el número de
animales abandonados que viven en la ciudad vagando en la
basura, muchos de ellos enfermos y escuálidos. De esta
forma, los animales dejarían de reproducirse sin control y,
los que sigan sin dueño, podrían ser atendidos mejor por los
centros designados para ello.
José María afirmó además, que ya ha propuesto con
anterioridad ideas al respecto a la Ciudad, y él mismo
añadió que estaría dispuesto a comprometerse a practicar un
número determinado de castraciones al mes a gatos
abandonados, por un coste inferior al estipulado, y cree que
otros veterinarios estarían de acuerdo a realizar estas
operaciones de igual forma, para ayudar a que el número de
animales vagabundos disminuya.
El presidente de la protectora de animales de Ceuta,
Federico Carrasco, reconoció que en este momento el problema
de los gatos “es el más gordo”que tienen . En la protectora
se enfrentan a multitud de animales abandonados, pero en el
presente cuentan con 140 gatos sin dueño que se esfuerzan en
cuidar. “Trabajamos con la ayuda de una protectora de
Madrid, que nos envía medicación y jaulas, y a los que
mandamos muchos gatos” también. “La mayoría de los gatos que
recibimos están en un estado deplorable, los más
atropellados, o los encontramos nosotros mismos debajo de
coches maullando, hambrientos”.
Carrasco explicó que la protectora recibe una importante
subvención de la consejería de sanidad, que costea un 60% de
los gastos de la protectora. Pero matizó que esto no es
suficiente, necesitan más fondos para dar “un trato mejor y
más adecuado” a los animales que tienen a su cargo.
Sobre la posibilidad de una solución a este problema,
Carrasco afirmó que necesitan una mayor subvención pública
para esterilizar a los gatos y que no tengan más crías, y
que la gente esté más concienciada y “pare de alimentarlos
en la calle” puesto que así se constituyen en comunas que
siguen creciendo en la ciudad.
|