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La asociación de vecinos de San antonio se reunió hace dos
semanas con el presidente de la Ciudad Autónoma, Juan Vivas,
para plantearle las cuestiones que más les afectan en estos
momentos. Los vértices fundamentales de los problemas de la
barriada son tres: la inseguridad ciudadana, los transportes
públicos y los accesos a la barriada.
Posiblemente la delincuencia que sufre la zona es lo que más
preocupa en San Antonio. El pasado fin de semana, según
afirman fuentes vecinales, un decena de coches sufrieron el
vandalismo gratuito en sus cristales, ya que los hurtos
fueron mínimos. Los vecinos incluso se han planteado las
patrullas ciudadanas, pero esperaran tras la reunión con
Vivas.
El presidente también se ha comprometido con ellos para de
cara a mejorar los accesos a la barriada. El próximo mes de
septiembre debería estar terminado el tramo que une la
última parada de autobús con San antonio. Este tramo es
peligrosos según los vecinos ya que el autobús público no
accede hasta el final. Además la anchura del arcén es
demasiado estrecha.
El otro gran problema que sufre la barriada es la
incomunicación por transporte, lo que provoca que cada
familia tenga que tener más de un coche. El problema se ha
recrudecido tras el cambio de ruta de la línea que llega
hasta San Antonio.
Hace unos meses era una línea directa, sin apenas paradas,
lo que permitía que los horarios establecido se cumplieran
sin problemas. En estos momentos el tráfico desvirtúa los
horario y los vecinos no saben a qué a tenerse cuando
quieren trasladarse hasta el centro de la ciudad.
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