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Los expertos juristas que han participado durante la semana
pasada en el curso ‘Menores extranjeros no acompañados
[MENA]: migraciones de menores extranjeros con especial
atención a los menores marroquíes. Aspectos civiles de
protección administrativos y penales’, clausurado el jueves
en Lanzarote, manifestaron su rechazo a la iniciativa de
crear centros en África para acoger a los menores
repatriados desde España con el fin de conseguir su
reagrupación familiar.
Así lo destacó ayer el Colectivo DRARI de Investigación
Acción Participativa por los Derechos del Niño, que en una
nota de prensa recogió las declaraciones del vocal del
Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Félix Pantoja,
quien insistió en Canarias en que “el interés del menor
extranjero es permanecer en España, porque han salido de su
país, en la mayoría de los casos empujados por sus padres,
que no los van a recibir bien si regresan allí”.
En los mismos términos se expresó Javier Ruiz, director del
Programa de Menores de CEAR en Tánger. Ruiz, que lleva años
trabajando en el ámbito de la protección integral a la
infancia en el área de Marrakech, Tánger y Casablanca, entre
otras ciudades, señaló que la solución de la emigración
clandestina de los menores del país vecino está en “trabajar
en origen para resolver los serios problemas de los niños en
Marruecos”, entre los que citó “el elevado número de niños
que viven en la calle, el abandono escolar, los que trabajan
desde edades tempranas, o las niñas que sufren esclavitud
como empleadas del hogar, incluso, con edades de 9 años”.
A juicio de Ruiz, crear centros de acogida en origen para
los menores que sean devueltos desde España “no resuelve
nada”. A cambio, abogó por internacionalizar el problema
para lograr una adecuada solución que empezaría por
“resolver las carencias de los niños en su propio país con
ayuda internacional”.
Asistencia jurídica
La psiquiatra marroquí Amina Bargasch también expuso en el
citado foro su oposición a estos centros y criticó que desde
España se haya planteado esta propuesta.
Pantoja también señaló que los especialistas en inmigración
están “preocupados” por la escasa defensa de los derechos
del niño en el proceso de repatriación de los MENA “por la
falta de un defensor judicial, distinto del que aportan las
instituciones autonómicas, lo que hace que el proceso sea,
según su opinión, “dudoso y discutible”. “Hay que ampliar la
asistencia jurídica y por buscar los instrumentos del
ordenamiento jurídico que sirvan para reforzar las garantías
de protección de los derechos de los MENA”, señaló.
Las jornadas, en las que también intervinieron escritores,
antropólogos, periodistas y profesores universitarios,
sirvieron, según destacó Pantoja, para “aportar nuevos
elementos para la solución de este complejo problema”.
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inmigración / menores no acompañados
