Después de conseguir la permanencia la pasada jornada, el
Goyu Ryu cerró ayer la temporada 2006/2007 recibiendo un
nuevo 6-0 en contra. En esta ocasión el rival era el Dos
Hermanas San Andrés, un equipo que buscaba los tres puntos
para intentar eludir el descenso a la Liga Nacional Juvenil.
El conjunto ceutí fue, parcialmente, víctima del enrrarecido
ambiente existente entre ambos clubs tras la denuncia
interpuesta por alineación indebida ante el Comité de
Competición de la Federación Española de Fútbol por el Dos
Hermanas después del encuentro de la primera vuelta. Un
extraño clima que condicionó, y mucho, las opciones de
triunfo ceutíes. Los jugadores de Damian Torres, temerosos
de lo que pudiera suceder extradeportivamente en los
hostiles graderíos, nunca prestaron la debida atención al
encuentro. Circunstancia que aprovecharon a la perfección
los malagueños para pasar por encima de los caballas,
sentenciar el choque en menos de media hora, y conseguir los
tres puntos.
En lo deportivo el encuentro fue un verdadero monólogo de
los locales de principio a fin. Tanto que al cuarto de hora
ya vencían por dos goles a cero. En el minuto 38, un
sonrojante 4-0 ya figuraba en el marcador ante la
inoperancia de unos caballas descentrados y carentes de la
más mínima motivación.
El bloque caballa, visiblemente relajado y falto de
reflejos, era incapaz de acercarse a la meta rival, mientras
se dedicaba a ver venir el juego local y a dejar pasar los
últimos minutos de la campaña.
Aunque, si es de justicia señalar que el Goyu Ryu acudió al
partido seriamente mermado con sólo trece jugadores. Además
de la convocatoria de Yunes con el AD Ceuta, el equipo contó
con las ausencias de varios integrantes de la plantilla que
decidieron por cuenta propia no viajar.
En la reanudación, el Dos Hermanas no tardó ni un minuto en
hacer el quinto. Fue entonces cuando los caballas
despertaron de su largo letargo y gozaron de cuatro
ocasiones para hacer el gol de la honra. Sin embargo, ese
tanto nunca llegó. Exactamente lo mismo que la permanencia
de los malagueños, ya que debían esperar la derrota del
Fuengirola ante el Córdoba para conservar la categoría y
ésta no se produjo.
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