La Policía Nacional ha enviado el informe de las actuaciones
llevadas a cabo en relación a la investigación sobre la
presunta revelación de secreto sucedida en la segunda
sección de la Comandancia General de Ceuta –Inteligencia
Militar- que motivó la publicación de documentos internos de
los servicios secretos de la COMGE ceutí al Juez Togado
Militar de Ceuta.
El magistrado de la circunscripción militar, Juan Antonio
Gómez Hidalgo había solicitado a la Jefatura Superior de
Policía de Ceuta el inicio de una investigación esclarecer
la famosa filtración de documentos supuestamente extraídos
de la llamada segunda sección, donde se ubica la Unidad de
Inteligencia que estaría formada por 17 militares y por 6
guardias civiles adscritos al GOSET (Grupo Operativo al
Servicio del Ejército de Tierra).
El informe policial, del que no se ha sabido su contenido,
centraría especialmente las responsabilidades sobre el
delito perseguido por la autoridad judicial militar, la
Revelación de Secretos.
Desde el pasado 5 de marzo fueron desfilando por las
oficinas de la Jefatura Superior de Policía cuantos guardias
civiles y militares se citaron para ‘prestar declaración’.
El Togado prescindía así de la Guardia Civil ante la
presunción de que agentes de la Benemérita pudieran estar
involucrados en el supuesto delito.
Pero el ámbito de la investigación no sólo se ha
circunscrito a la propia segunda sección, la Policía
Nacional habría, además, solicitado las declaraciones de
determinados civiles como piezas clave para la divulgación
de los documentos filtrados.
Si, por un lado la cúpula militar por orden del Ministerio
de Defensa quiso depurar responsabilidades ante la sonora y
pública evidencia de prácticas de espionaje sobre civiles
realizando –hasta ahora- un solo cese oficial {el del
teniente coronel Albarracín} y aún no se habría podido cesar
al teniente coronel Berenguer por cumplir servicio al mando
de la OTAN en Europa {además se ha apartado del servicio a
casi todos los miembros de la Unidad de Inteligencia Militar
de la COMGE ceutí}; por otro, el Juez Togado Militar
pretende ajusticiar a quienes ‘osaron’ poner en circulación
documentos internos en posesión de los servicios secretos
del Ejército de Tierra.
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