El caso de la inauguración, el
pasado sábado, del nuevo aparcamiento subterráneo de la
Plaza de los Reyes va camino de convertirse, a la luz de lo
dicho y hecho durante los tres últimos días, en el último
punto de fricción entre la Ciudad Autónoma y el PSOE, ahora
con la Delegación del Gobierno también por el medio. O todo
lo contrario. La obra, una imperiosa necesidad sin duda para
una ciudad como esta donde el aparcamiento va camino de
convertirse en un objeto de lujo, especialmente en el
centro, fue, según los socialistas, inaugurada sin las
correspondientes licencias de implantación y apertura. La
líder socialista, Antonia Palomo, lo atribuyó el martes al
“afán por inaugurar cosas” del Ejecutivo ceutí.
Ayer, con más tino, García Arreciado aclaró que según las
informaciones en su poder la apertura del subterráneo se
realizó, efectivamente, con varios trámites por cumplir pero
si entrar en cuáles fueron las razones por las que se
produjo ese presunto desliz.
Hace bien el delegado en no hurgar en una herida que, de
haberla, no le corresponde echar vinagre sino contribuir a
restañarla. Eso parece ser lo que hizo, instando a sus
servicios de Seguridad e Higiene a elaborar cuanto antes su
informe pertinente para que el Consejo de Gobierno primero y
la Consejería de Fomento después pusiesen al día
administrativamente hablando la obra.
El gesto puede ser un motivo más para que la Administración
General del Estado y la Ciudad vuelvan, porque no sería la
primera vez, a tirarse los trastos a la cabeza, pero la
experiencia demuestra que ese no es nunca el mejor camino
para los intereses de Ceuta. Si el Gobierno autonómico
cometió un error no estaría de más que lo reconociese
porque, con argumentos en la mano, que de seguro los habrá,
todo el arco político debería, también, aceptarlos.
En todo caso, los cientos de ceutíes que ya han disfrutado
del nuevo aparcamiento, y en se grupo entran también todos
los comerciantes y empresarios de la zona, deben felicitarse
por la plena disponibilidad de un proyecto soñado que, por
fortuna, ya es una realidad.
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