La plantilla del Atlético de Ceuta ha aprovechado el parón
en el calendario para tomarse unos días de descanso. Unos
días que se espera sirvan para desconectar y volver con
ánimos renovados de cara a las siete finales que tienen que
jugar los rojiblancos de cara a la permanencia.
El guardameta Ezequiel, uno de los fijos en el esquema
caballa, cuenta que “el mister ha dado estos días de
descanso para que intentemos liberar la mente de toda la
presión que tenemos”, así que “intentaremos volver con las
pilas cargadas para el último empujón que le queda a la
liga”.
Aunque reconoce que olvidarse de lo que están viviendo es
“practicamente imposible”. Ya que “los familiares, los
amigos... todo el mundo te pregunta por como va el equipo y
es algo que no se puede olvidar”. Y asegura que se trata de
“algo preocupante y en lo que estamos poniendo todo de
nuestra parte para intentar sacar esto, que hay que
reconocer que es harto complicado”.
Olvidarse de los últimos disgustos es difícil, y más del más
reciente en La Línea donde hicieron un muy buen primer
periodo. “Yo creo que nadie hubiera pensado que la segunda
parte se fuera a dar como se dió después del primer tiempo
que habíamos hecho en el que La Balona solo había tirado un
tiro a puerta y nosotros tres”. Y no solo por la ocasiones,
sino porque “estábamos muy bien asentados en el campo sin
tener excesivo peligro sobre nuestra portería”. Pero tras la
reanudación, el buen trabajo que habíamos hecho hasta
entonces, se vino abajo porque “en la segunda parte nos
barrieron del campo” reconoce.
Una situación que hace pensar que el conjunto caballa pueda
estar teniendo mala suerte, pero también le está pasando
factura el mal arranque de campaña. “A este equipo le está
pesando el hecho de estar abajo desde un principio”. Y
continúa diciendo que “como se suele decir, a perro flaco
todo son pulgas”. Una vez que se está desarrollando el
partido, “a medio fallo que tengamos es un gol que nos
hacen, mientras que nosotros, para hacer un gol, necesitamos
hacer unas cinco o seis ocasiones”.
Al menos, la diferencia con el Xerez B sigue siendo de cinco
puntos. “La verdad es que ahí sí estamos teniendo suerte,
porque los equipos que están por encima nuestra están
pinchando” y se mantiene la distancia. A pesar de que ahora
se haya colado el Chiclana entre ambos conjuntos. “Antes
solo teníamos al Xerez B y ahora está también el Chiclana”.
En cuanto a recortar diferencias con sus predecesores, el
portero gaditano explica que “ahora lo que tendremos es que
intentar sumar de tres en tres y que los partidos de casa no
se escapen” concluye.
Por el rendimiento del equipo, asegura de que nadie debe
tener queja. “Al equipo no se le puede achacar que no corra,
que no luche, que no pelee. Estamos haciendo todo lo posible
y no estamos acertados de cara al gol, que es lo que nos
está costando los puntos”. En todo caso se les puede
recriminar que “no estemos acertados y no estemos marcando
goles”.
De su propio rendimiento, Ezequiel cree que “personalmente
las cosas no me han ido mal”. Y a continua diciendo que “lo
estoy haciendo medianamente bien, intento dar al equipo lo
que puedo”. Aunque es conciente de que puede aportar más.
“Se que puedo dar más, pero como todo el equipo”. Ahora lo
que está intentando es “aportar mi granito de arena para que
este equipo se quede en Tercera División” la próxima
temporada.
Para que el conjunto caballa mantenga la categoría “está más
claro que el agua que de los siete partidos que nos quedan
tenemos que ganar los cuatro de casa, incluso el partido del
Cabecense, si me apuras, también lo tenemos que ganar”. Pero
no tienen duda de que el reto es “muy complicado porque
vienen Los Barrios que está quinto, el Arcos, que está para
meterse en el play off”. Respetando a los rivales, pero sin
temer a nadie. “Venga el que venga, tenemos que hacer todo
lo posible para que queden los puntos aquí en Ceuta”.
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