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El incendio fortuito de la talla de la virgen María
Santísima de los Dolores le ha dejado daños de consideración
en la parte izquierda de la frente y en ambas manos, pero
especialmente en la izquierda. Un cirio sostenido en un
candelabro es el más que probable culpable de la quema de la
figura y la corrosión de su policromía, en la tarde de ayer,
en el interior de la iglesia de San Ildefonso, cuando se
procedía a liberar al preso. No obstante, la Hermandad de
Nuestro Padre Cautivo y Rescatado confía en que,
aparentemente, el fuego no ha alcanzado la madera por lo que
el próximo año, la pieza acompañará en la Estación de
Penitencia al Padre Jesús de Medinaceli.
Por el momento, la figura se encuentra cubierta en la casa
de la Hermandad hasta que el imaginero sevillano Miguel
Bejarano viaje hasta Ceuta para redactar el informe de daños
y dibuje un presupuesto. La previsión de este profesional es
de dos meses, pero no confirmará el tiempo de restauración
hasta que se asegure que el incendio no ha dañado la madera.
La talla, original de 1729, ha sufrido varios percances
similares. El último, un Jueves Santo de 1987, mientras el
Cristo de Medinaceli procesionaba. Entonces, la
rehabilitación de la virgen María no satisfizó del todo a la
Hermandad por lo que vivió otra restauración en 2002, de
mano de Bejarano. Esta cadena de incendios han supuesto que
a esta pieza tan antigua “no le quede nada del original”,
indica el Hermano Mayor de la cofradía, Francisco Hernández.
Bejarano y Hernández volverán a ponerse en contacto el
próximo lunes para establecer una fecha de recogida de la
pieza. El experto imaginero vendrá, en próximas semanas -una
vez concluya la Semana Santa- a la Ciudad Autónoma para
trasladarla a su taller de Sevilla. La previsión, dada su
experiencia, es que “se pueda arreglar los daños en dos
meses de tratamiento”.
Los hechos
Ayer, sobre las 19,25 horas, mientras transcurría la
procesión del Cristo de Medinaceli desde su capilla hasta el
centro de Los Rosales, justo en el momento en que los
hermanos portaban la imagen del Cristo por el patio de
acceso la prisión, Hernández informó a la Policía del
incidente después de su salida a las 18 horas.
El cuerpo de Bomberos apagó el incendio que se había
producido al encender un cirio que se hallaba en uno de los
candelabros que hay a ambos lados de la talla, de 150
centímetros, que se encontraba en una hornacina, a la
derecha del altar. La policía apunta a un hecho fortuito
porque todo se produjo en secuencia temporal, no obstante,
se continuarán con las gestiones para determinar el
esclarecimiento de la quema.
Este suceso ha sido un duro golpe para la hermandad del
Medinaceli porque tenían puestas muchas expectativas en que
la imagen procesionase durante la Semana Santa. De hecho,
Bejarano reconoció que tuvo que “tranquilizar” a los
Hermanos Cofrades ante la inesperada situación.
Hernández asume una “gran pesadumbre por el incendio de una
imagen que tenía enamorados a todos los miembros de la
Hermandad”. No obstante, tiene puestas sus esperanzas en que
“Dios inspiró a Bejarano” para hacer la primera restauración
y así sucederá en esta segunda ocasión.
Ahora mismo, explica que a todos los Hermanos “se les ha
caído el alma a los pies”, pero hasta la valoración de
Bejarano, se mantendrá la calma alrededor de la
rehabilitación de la virgen María.
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patrimonio / incendio
