El Ceutí volvió a demostrar el pasado fin de semana con la
doble salida a La Cañada y Almoradí que es un equipo muy
irregular, que alterna momentos brillantes con otros en los
que pierde la brújula y se deja llevar como diría Andrés
Montes. Y es que el equipo de Rafael Almagro ‘Ali’ no dio
una a derechas en la pista del Casi La Cañada Keymare ante
el que perdió por 34 goles a 27, pero ni veinticuatro horas
después fue capaz de vencer al Almoradí por 28-29 y terminó
con la condición de invicto del conjunto alicantino. El
entrenador unionista es el primero al que le cuesta
encontrar una explicación a la tremenda irregularidad de su
equipo, que en caso de haber ganado en Almería lo tendría
todo a favor para acabar la Liga en una más que meritoria
cuarta posición por detrás del Almoradí, que repite título
de campeón y de los dos clubes procedentes de la División de
Honor ‘B’, el Agua Sierra Cazorla y el Universidad de
Granada. De todos modos, Ali ha demostrado con su trabajo,
en una temporada marcada por el recorte del presupuesto y la
doble salida de Julio Latas y Pedro Bago en el arranque del
Campeonato, que está capacitado para asumir el mando la
próxima temporada y marcar las pautas en la confección de
una plantilla competitiva y ambiciosa.
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