El Gimnasio Goyu Ryu seguirá una temporada más, y será la
decimocuarta, en la élite del fútbol juvenil nacional. Con
la victoria del pasado sábado por cuatro goles a cero sobre
el Cádiz en el partido que les midió en el José Benoliel a
los gaditanos, los pupilos de Damián Torres sumaron los
puntos necesarios para certificar un año más su presencia en
el grupo IV de División de Honor.
Y eso a falta de una jornada en la que se afrontará el
partido con el Dos Hermanas San Andrés como un mero trámite,
y sin tener que aguardar a la resolución del Comité de
Apelación sobre el recurso presentado desde el propio Dos
Hermanas San Andrés por alineación indebida en el partido de
la primera vuelta.
Para dicho encuentro Damián Torres cuenta que “queremos ir a
disfrutar”, aunque entiende que se trata de “un campo
bastante hostil, en el que habrá otro partido en la grada”.
“Ya en la previa hablamos de la dificultad que habría de no
ganar al Cádiz y eso hizo que los jugadores estuvieran más
metidos”.
Recordando el partido del pasado sábado ante los gaditanos,
reconoce que “esperaba un Cádiz más ofensivo y con más
peligro. Se notaba que no se jugaban nada y nosotros salimos
más metidos y nos salieron bien las cosas”.
Después de regresar el próximo jueves a los entrenamientos
con un partidillo, planifica que “ya la semana que viene
volveremos a entrenar normalmente”.
El balance que hace de la temporada es “bueno ya que han
jugado más de veinticinco niños de la ciudad en División de
Honor”. Aunque en las condiciones que ha trabajado “no eran
las que me hubieran gustado, ya que no he podido contar en
los entrenamientos conjuntos con todos”. Una situación que
“nos ha perjudicado mucho”.
El técnico caballa confiesa que “no hubiera pensado que nos
fuera a costar tanto”. Y busca una explicación, argumentando
que “el haber sufrido tanto se puede deber a que el grupo no
ha entrenado junto en toda la temporada”. Algo que de
haberse producido, para Damián Torres, hubiera sido otra
historia. “De haberlo hecho podríamos haber quedado entre
los cuatro primeros”.
El preparador del conjunto amarillo termina contrato esta
temporada, pero a día de hoy no quiere pensar en su futuro.
“Es pronto para pensar lo que voy a hacer. Lo que si tengo
que agradecer es la la confianza que ha depositado el club
en mí, que ha sido mucha. Además no se si el club querrá
contar conmigo el año que viene”.
Para terminar, Torres expone que “me gusta trabajar al día a
día. Es algo que no he podido hacer este año y es el mal
sabor de boca que tengo”, concluye.
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