Será el próximo día 10 de abril cuando se reúna, por primera
vez, el Grupo de Trabajo formado por representantes del
Estado y de los gobiernos autónomos de Ceuta, Melilla, que
deberán encaminar las negociaciones hacia la denominada co-gestión
en materia urbanística.
Ceuta envía como interlocutor al consejero de Fomento, Juan
Antonio Rodríguez Ferrón, mientras que Melilla estará
representada por Rafael Marín, consejero de Fomento.
Actuarán por el Estado, el secretario General Técnico del
Ministerio de Vivienda, Javier García Fernández e Ignacio
Casas Santero, vocal asesor de la Dirección General de
Cooperación Autonómica, en representación del MAP quien
actuará además de secretario.
Las recientes visitas a la Ciudad Autónoma del Ministro de
Administraciones Públicas, Jordi Sevilla y la de Vivienda,
María Antonia Trujillo, sirvieron para acercar posturas
entorno a la devolución de competencias en Urbanismo para
las ciudades de Ceuta y Melilla una vez les fueron retiradas
estas transferencias en el año 2000 como consecuencia de la
llegada al poder del GIL.
El Gobierno presidido por Juan Vivas mantiene una constante
petición para la devolución de estas competencias o la
cogestión en todo caso desde que fuera investido presidente
de Ceuta tras las elecciones locales de 2003. De hecho, a lo
largo de su legislatura al frente del gobierno de Ceuta que
ahora acaba, la ex consejera de Fomento, Elena Sánchez (qepd)
inició el proceso de acercamiento hacia la asunción, de
nuevo, de estas competencias. Francisco Márquez -gerente de
Emvicesa- se ha mantenido muy próximo en este tiempo tanto a
Sánchez como, en estos momentos, a Rodríguez Ferrón quien
tomó el testigo de las negociaciones tras el deceso de la
recordada consejera.
En estos momentos, y después de varios lances políticos
entre el Estado y los gobiernos de Ceuta y Melilla que se
han mantenido unidos ante la defensa de sus intereses frente
a Madrid, las posturas están muy próximas a producir
noticias positivas. Se habla de un mayor dinamismo en la
gestión del suelo por parte de los gobiernos autónomos, lo
suficiente como para agilizar procedimientos urbanísticos
que llegan a estancarse como consecuencia de la exclusiva
competencia estatal sobre este aspecto del territorio.
El Gobierno de la nación ha mostrado su intención de
favorecer la gestión sin perder el control del suelo. Así
las cosas, los representantes de Ceuta y Melilla realizaron
propuestas al MAP de cara a lograr un acuerdo para
cogestionar el área. En este sentido, y basándose en los
parámetros propuestos por los gobiernos ceutí y melillense,
el Grupo Parlamentario Popular en el Senado incorporó esta
semana a la tramitación de la nueva Ley del Suelo, cuatro
enmiendas referidas a las dos ciudades autónomas al objeto
de que recuperen el protagonismo en la gestión urbanística
dotando, por su parte, al Estado de la capacidad de visado.
|