El pasado Viernes día veintitrés tuvo lugar, en el Club
Hispalis de la Ciudad de Sevilla, la Primera Exaltación de
la Semana Santa de Ceuta y organizada por la Casa de Ceuta
en Sevilla.
En un acto íntimo, cofrade e impregnado de sabor a Ceuta y a
su Semana de Pasión un grupo de “caballas” se reunieron para
escuchar las palabras, salidas como el siempre dice de lo
más profundo de su corazón, pronunciadas por Rafael López
García de Vinuesa.
Tras una semblanza del Pregonero a cargo del Presidente de
la Casa Juan Carlos Jiménez Gamero y no sin antes presentar
también el Cartel anunciador de la Semana Santa de nuestra
Ciudad, se dio paso a dicha exaltación.
Rafael, supo llevar a todos los allí presentes, en volandas,
en un maravilloso viaje, en un singular paseo en torno a
Ceuta y una tradición tan arraigada en nuestra Ciudad como
lo es la Semana Santa. Viaje o paseo del que a muchos costó,
una vez finalizada su intervención, regresar.
Fue una hora, y una hora que los propios asistentes
destacanban que se hizo muy corta, cargadita de emociones,
de sensaciones, de vivencias, de recuerdos que todos de
alguna u otra manera llevan dentro y que Rafael hizo
despertar de una manera antológica, consiguiendo que muchos
de los presentes no pudiesen contener la emoción por lo que
allí escuchaban. “En cualquier lugar, allá donde se reúnan
un grupo de Caballas con ganas de oír hablar de Ceuta, allí
estaré yo” fueron algunas de sus primeras palabras.
Fue un paseo en el que los que por circunstancias de la vida
viven alejados de nuestra tierra, volvieron a recorrer las
calles Jaudenes y el Revellín, Manzanera o Haddu; el colegio
de las Monjas y el de San Agustín; Cervantes y Amargura;
volvieron a ver aquel Encuentro y al Señor de Ceuta;
estuvieron en el Valle y en los Remedios; en la Placita de
España y con nuestra Patrona en su Plaza de África… En
definitiva un paseo inolvidable por los rincones de la
siempre añorada Ceuta.
Para finalizar este acto, enmarcado dentro de las
actividades que la Vocalía de Cultura de esta Casa de Ceuta
en Sevilla tiene previstas para este año 2007, los
asistentes pudieron degustar, como manda la tradición, unas
exquisitas torrijas y una copita de vino de dulce.
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