Como cada fin de semana en época de migraciones, la Sociedad
de Estudios Ornitológicos de Ceuta lleva a cabo
observaciones de aves y anillajes para el estudio de estos
movimientos migratorios de los que nuestra ciudad es
espectadora privilegiada. Los puestos de avistamiento se
sitúan en Cala Mocarro, en la playa del Desnarigado y en las
inmediaciones de Benzú y este fin de semana volverán a ser
testigos de estas actividades.
Los avistamientos propios de esta época del año son los de
aves marinas principalmente, aunque no son pocas las aves
‘terrestres’ que pueden verse cruzando el Estrecho, pese a
que la época más propicia para ver a Milanos, Cigüeñas y
otros ejemplares sea la otoñada, cuando regresan al sur en
busca de climas más suaves que los del interior de la
península ibérica.
De esta forma, Ceuta es testigo de excepción de uno de los
fenómenos menos conocidos dentro de la Ornitología y más
bellos e impresionantes de la naturaleza, ya que constituye
por su localización en el Estrecho la única vía de migración
para las aves que cruzan del Atlántico al Mediterráneo, y
desde África hacia el Centro y Norte de Europa.
La migración de primavera es la denominada ‘prenupcial’, ya
que las aves que migran en esta época parten rumbo al norte
en busca de los lugares de anidamiento y cría. En esta época
son especialmente interesantes los vuelos de las distintas
especies de Pardelas, como la Balear y la Cenicienta, muy
abundantes en nuestras aguas. también ahora migran rumbo al
norte los Alcatraces y algunas especies de Gabiotas como la
común Gabiota reidora o la de patas amarillas, tampoco se
descarta avistar frailecillos.
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