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“He hablado con el ministro [de Trabajo, Jesús Caldera] y
tengo su autorización para negar tajantemente en nombre del
Gobierno que haya participado en una reunión específica con
IU para hablar sobre asuntos de Ceuta o que haya
comprometido 2 millones de euros más para los Planes de
Empleo de la ciudad”. Con esta frase el delegado del
Ejecutivo de la nación en Ceuta, Jenaro García Arreciado,
desató ayer, por segunda vez en sólo tres días la ira y la
“indignación” de IU a nivel no sólo local, sino también
nacional, por lo que sus principales dirigentes anunciaron
inmediatamente después de la comparecencia del onubense que
pedirán su cese por “indigno, mentiroso e irresponsable” y
que solicitará la presencia de Caldera en el Congreso para
aclarar “si él también es un mentiroso”.
El choque de trenes políticos que se consumó ayer comenzó,
en realidad, el pasado miércoles, cuando al salir del
Ministerio de Trabajo, donde se reunieron con el jefe del
gabinete técnico técnico de la Secretaría Gene-
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coalición / la resaca de la
visita de udce-iu al ministerio
