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El gabinete jurídico de la unión General de Trabajadores
interpuso una demanda a favor de una cocinera de segunda que
presta sus servicios en un colegio público de la Ciudad
Autónoma de Ceuta dependiente del Ministerio de Educación y
Cultura. Dicha demanda se fundamentó por el contrato de
trabajo que la trabajadora firmó con el MEC.
Los abogados de la organización sindical estimaron que dicho
contrato no era de sustitución por haber desaparecido la
causa de dicha contratación, ya venía prestando sin solución
continuidad sus servicios por cuenta y orden del MEC,
“sustituyendo a una compañera que fue declarada en la
situación de invalidez permanente”.
El Juzgado de lo Social número 1 ha fallado a favor de la
trabajadora del MEC.
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