El pasado jueves supimos de mano de Hilda Castro, la
presidenta de Mujeres Mastectomizadas de Ceuta, que durante
el mes de febrero se han diagnosticado en Ceuta tres nuevos
casos de cáncer de mama en mujeres menores de 35 años. El
dato no deja de ser inquietante por cuanto a la juventud de
las afectadas, ya que generalmente el cáncer de mama se
presenta en mujeres mayores de 40 años. Ante el considerable
crecimiento de estos casos desde el mes de septiembre,
Castro invitó a las jovénes ceutíes a hacerse mamografías,
el método más efectivo para la detección de este mal que
afecta a unas 18.000 mujeres cada año en nuestro país.
No quiere decirse que Ceuta sea un caso especial ni hay
voluntad de crear alarma social, ya que este mal está, por
desgracia, aumentando en todas partes, también entre mujeres
jóvenes. Por el momento no se tienen datos exactos del
número de casos que hay en Ceuta, pero si se sabe que hay
“muchas mujeres operadas”, por lo que los nuevos casos, en
una población tan pequeña como la ceutí, incrementan los
porcentajes de afectadas por encima de otras ciudades
españolas.
Una desventaja de nuestra ciudad para quienes padecen este
problema es que las afectadas tienen que salir de la ciudad
para acceder a los tratamientos. En la actualidad sólo hay
un sitio en el que se pueda recibir quimioterapia en Ceuta,
y la próxima apertura de un centro en Algeciras no terminará
de solucionar este problema de la mayoría de las pacientes
ceutíes, tienen que acudir a Sevilla, Cádiz, o a Málaga, con
las consiguientes molestias que esto origina al tratarse de
un tratamiento agotador y con muchas molestias físicas como
mareos, cansancio, etc. Desde Mujeres Mastectomizadas se ha
pedido reiteradas veces a Sanidad que se traigan oncólogos a
la ciudad, pero por desgracia, la escasez de estos
profesionales en toda España complica mucho esta
posibilidad.
Respecto al cáncer de mama, hay que saber que es la causa
más común de esta enfermedad entre las mujeres, sin embargo
ha dejado de ser la principal causa de muerte por cáncer al
haberse conseguido un tratamiento efectivo y hacerlo
‘curable’.
Las células del cuerpo normalmente crecen y mueren de forma
controlada. Por el contrario, si comienzan a dividirse y a
crecer sin control causan un cúmulo anormal, el ‘tumor’. Si
el tumor no invade los tejidos ni los órganos cercanos
recibe el nombre de ‘benigno’ o no canceroso, en caso
contrario es éste el comienzo de la enfermedad, el tumor
‘maligno’.
El cáncer de mama puede originarse en las glándulas o en los
conductos de los senos, y desde hace unos años se viene
estudiando sus posibles características genéticas que
podrían hacerlo hereditario. Los síntomas al principio son
inapreciables, pero mediante la exploración mamaria
personal, efectuada por la mujer frente al espejo, elevando
los brazos primero, y mediante palpamientos en el cuadrante
supero-externo de los senos después, puede detectarse el
posible tumor. De cualquier forma, el mejor método y el más
indicado para una correcta detección sigue siendo la
mamografía.
|