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El Ciudad de Ceuta, que durante tantas jornadas de la
primera vuelta estuvo coqueteando con los puestos de
descenso, se ha situado, después de una excepcional segunda
vuelta en el que ha sumado ocho jornadas sin conocer la
derrota, entre los cuatro mejores equipos del grupo.
Fernando Muñoz, su técnico, ha sido el gran artífice de esta
proeza, pues ha tenido que sacar adelante a un equipo de
jugadores muy jóvenes, siendo el principal objetivo el de
formarlos para que pudiesen jugar en el primer equipo. Aún
así, y sin poder contar muchas veces con ellos por coincidir
el horario de partidos, el técnico caballa ha sabido sacar
el máximo partido de los jugadores que disponía en cada uno
de sus encuentros, consiguiendo finalmente ascender hasta
toda una cuarta plaza y codearse con los mejores equipos de
la categoría.
“A pesar de hacer una gran primera vuelta en casa, sólo
conseguimos sacar un punto lejos de nuestra pista. Sabía que
mientras no comenzásemos a vencer partidos a domicilio no
dejaríamos de ser un equipo mediocre de mitad de la tabla, y
ahora que lo estamos consiguiendo, hemos ascendido a puestos
altos”, afirmó Fernando.
Respecto al objetivo que se planteó el equipo al principio
de temporada, para el técnico ceutí ya ha sido cumplido, por
lo que ahora queda seguir peleando para hacerlo lo mejor
posible hasta el último partido. “Pienso que nuestro
objetivo primordial, el de formar jugadores para el primer
equipo, lo hemos cumplido ya, por lo que todo lo que venga a
partir de ahora, será bueno para el equipo”, reconoció.
Y es que jugadores como Mohamed, Dani o Raúl Fernández se
están convirtiendo jornada a jornada en fijos para la UA
Ceutí, además de Sufian o Segura, por lo que este objetivo
está más que de sobra cumplido. Sin embargo, y en vista del
juego ofrecido por el Ciudad ante el Grupo Prasur, a pesar
de la victoria, y a los dos próximos enfrentamientos,
Fernando sabe que para no fallar al final y terminar entre
los mejores del grupo hay que tener sentido de la humildad,
y saber encarar las situaciones con madurez. “No podemos
dejar de lado nuestro sentido de la humildad. Debemos de
seguir luchando al máximo y dándolo todo en los partidos”,
concluyó el técnico del Ciudad de Ceuta.
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