Militares y guardias civiles adscritos o allegados a la
Unidad de Inteligencia de la Comandancia General de Ceuta
vienen prestando -voluntariamente- declaración en la
Jefatura Superior de la Policía Nacional después de que el
juez togado militar, Juan Ignacio Gómez Hidalgo emitiera un
escrito mandatando al Cuerpo Nacional de la Policía las
actuaciones tendentes al esclarecimiento del presunto delito
de ‘Revelación de Secretos’.
Efectivamente, desde el pasado lunes han ido desfilando por
las oficinas de la Jefatura Superior de Policía de Ceuta
cuantos guardias y militares han sido citados a ‘prestar
declaración’. Un acto voluntario, de cualquier modo del que
hasta ahora nadie ha renunciado a ‘colaborar’ con los
responsables de la dirección de la investigación.
El Togado ha prescindido de la Guardia Civil para que, de un
modo oficial, se encargara de las diligencias del caso y ha
dado el testigo a la Policía para que esclarezca la famosa
filtración de documentos supuestamente extraídos de la
llamada segunda sección, donde se ubica la Unidad de
Inteligencia que, presuntamente está formada por 17
militares y por seis guardias civiles adscritos al GOSET
(Grupo Operativo al Servicio del Ejército de Tierra).
Si, por un lado la cúpula militar en España por orden del
Ministerio de Defensa, ha querido ‘depurar’
responsabilidades realizando -hasta ahora- un sólo cese
oficial, el del teniente coronel Albarracín, no se ha podido
ejecutar otro cese supuestamente previsto contra el teniente
coronel Berenguer quien presta servicio para la OTAN y ha
apartado de la Unidad de Inteligencia a casi la totalidad de
sus miembros; por otro, el juez togado militar pretende
ajusticiar a quienes ‘osaron’ poner en circulación
documentos internos en posesión de los servicios secretos
del Ejército de Tierra.
Para ello la Jefatura Superior de Policía es el punto
habitual de encuentro en esta última semana de los que
tienen algo qué decir en esta trama.
Por las oficinas que el Cuerpo Nacional de Policía tiene en
Ceuta han pasado por el momento militares y cuantos guardias
civiles formaban parte de la Unidad investigada. Asimismo,
en breve, serán citados determinados civiles que, de algún
modo, forman parte relevante como actores principales de la
salida a la luz pública de las denunciadas prácticas de
‘espionaje’ a civiles.
Desde el interior de la Guardia Civil no se estaría en
desacuerdo conque los ‘compañeros’ de la Policía Nacional
realicen el ‘trabajo’, aunque muchos destacan el hecho de
que el Juez Togado haya decidido prescindir de la Benemérita
por la presencia de guardias civiles en la unidad
investigada.
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