Tarek Dris y Francisco José Almagro Artiel ‘Estevens’,
integrantes del Club ‘CAS’ se encuentran ya en Sevilla, al
igual que los siete palistas de ‘Los Delfines’, para
participar en la XXXVIII edición del Campeonato de España de
Invierno, que tendrá lugar en la Isla de la Cartuja. Los
palistas ceutíes, que partieron ayer hacia tierras
sevillanas junto con su entrenador, Martín Vázquez, esperan
comenzar con buen pie y completar una buena actuación en su
debut, para el que llevan preparándose desde hace más de un
año.
Tarek, que comenzó su carrera como piragüista hace un año
tras abandonar un prometedor futuro como atleta, es el único
cadete del equipo elegido para participar en esta complicada
cita, en la que se espera la presencia de cientos de
palistas llegados de todos los rincones del territorio
nacional. ‘Estevens’, su compañero de equipo, participará
como juvenil después de haber superado con creces los
tiempos estimados para el primer corte.
Martín Vázquez reconoce que aunque será complicado pasar la
ronda clasificatoria, los representantes ceutíes tienen
muchas posibilidades de llegar a la fase final a la que sólo
podrán llegar los sesenta mejores. “Sé que es complicado.
Ninguno de los dos llevan mucho tiempo practicando este
deporte, pero están preparados para afrontar esta dura
prueba. Si tomamos como referencia los tiempos obtenidos en
la pasada edición de este Campeonato de Invierno, estoy
seguro de que llegarán a la ronda final. Una vez allí, a
darlo todo para quedar en el mejor puesto posible”, afirmó
el entrenador ceutí.
Y es que para poder cumplir el objetivo de terminar entre
los sesenta mejores, Tarek y ‘Estevens’ deberán pasar hoy
una primera fase eliminatoria, en la que irán saliendo de
cinco en cinco participantes, a modo de contra-reloj. Tras
esta primera fase, nuestros palistas deberán recorrer, ya el
domingo, los cinco kilómetros de los que se compone la
prueba.
Los palistas ceutíes, que ya participaron en el ‘Descenso
del Sella’, en Asturias, comprobarán en Sevilla los
resultados de un año entero de entrenamiento en el Pantano
del Renegado, donde han estado controlando los tiempos hasta
el último día para superar la difícil prueba de quedar entre
los sesenta mejores palistas nacionales.
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