deportes - MARTES, 6 DE MARZO DE 2007

CEUTA
Manuel Montero
mmontero@elpueblodeceuta.com

Cuatro puntos. Esa es la distancia que separa al Atlético de Ceuta de la pemanencia. Una distancia mínima si se tiene en cuenta que hace menos de un mes el conjunto ceutí se encontraba último de la tabla y con solo doce en su casillero. Y es que tras la llegada de Jaco Zafrani al banquillo del 54, los rojiblancos han sumado ocho puntos de los últimos doce. Dos victorias y dos empates, que hace que los norteafricanos vean más cerca que nunca la salvación. Unos números que contrastan con los de sus antecesores en el vestuario caballa.

En cuanto al futuro, la entidad rojiblanca afronta el próximo sábado (16:30 horas) en el José Martínez Pirri una nueva final ante el Ayamonte. Un rival directo por eludir el descenso de categoría y que se encuentra a seis puntos de los ceutíes. Los onubenses, que arrastran una racha negativa de seis derrotas y un punto de los últimos 29, intentarán frenar su caída libre en un partido donde la victoria tendrá un valor doble para el que se lleve el gato al agua.

Para Pepe Ríos, presidente del Atlético de Ceuta, el choque ante el Ayamonte “será crítico” y no se fía ya que “los equipos que se encuentran con una trayectoria como la suya son los más peligrosos porque se agarran a un clavo ardiendo”.

En la directiva rojiblanca se respira un buen ambiente. “Estamos todos muy animados y supercontentos por como están yendo las cosas”.

Ríos asegura que los jugadores “están respondiendo” y que “su actitud está siendo sobresaliente”, ya que “están dando la cara”. “El grupo se encuentra muy unido y algunos futbolistas que parecían estár más desanimados o que no estaban jugando están respondiendo como auténticos profesionales”. Un ejemplo que para el directivo rojiblanco demuestra que “hay compañerismo dentro del vestuario”.

A pesar de que soplan buenos vientos por el 54, para el presidente rojiblanco “ahora viene lo más difícil” que será “que el equipo siga funcionando y se siga apretando el acelerador”.

En el partido ante el Sanluqueño, el máximo dirigente rojiblanco, vio “un partido serio” de los suyos, donde actuaron varios jugadores que no venían jugando ultimamente y que “dieron la cara”.

De cara al futuro, desde el club, se piensa en encarar todos los partidos que quedan de temporada con mentalidad ganadora. Para los de Pepe Ríos es indiferente el rival que tengan enfrente. “Da igual quien venga”, lo que habrá que hacer es “ir por ellos sea quien sea, ya estén arriba, abajo o a mitad de la tabla”.

Unos partidos para los que el Atlético de Ceuta necesitará que siga presente el efecto Jaco, “una vitamina que está funcionando para todos”.
 

Sólo sumaron tres de los siete equipos de la parte baja

De los siete equipos que pugnan por evitar el descenso solo tres lograron puntuar el pasado fin de semana.

El Atlético de Ceuta y el Sanluqueño, que empataron en El Palmar, sumaron un punto que tiene más valor para los ceutíes, y que deja a los gaditanos a nueve puntos de la zona de peligro.

El otro equipo que puntuó fue el Jerez Industrial (3-3) en su propio feudo ante un rival en alza como el San Fernando, tras remontar con tres tantos el gol inicial de los de Fali Castañeda.

El Ayamonte, el próximo rival de los rojiblancos, continúa con su caída libre tras caer en su campo ante el Cádiz (1-2) en un partido donde los amarillos llevaron la iniciativa.

Quien rompió su buena racha fue el Xerez B que cayó a domicilio en Los Palacios (2-1) tras cinco partidos sin conocer la derrota. El filial xerecista, conjunto que marca la frontera entre descenso y salvación, se sitúa a cuatro puntos del Atlético de Ceuta, que está un puesto por debajo.

Los otros dos equipos que descenderían, el Chiclana y el Cabecense, fueron derrotados. Los gaditanos en casa por el Betis B (0-2) y el Cabecense por un Lucena (4-0) que no perdonó en tierras cordobesas.